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Las comunidades negra, asiática y latina se han enfrentado a tiroteos masivos en dos semanas. Así están reaccionando

“Espero que podamos aprovechar este momento para apoyarnos mutuamente”, pidió un líder de una coalición, tras los sucesos en Buffalo, Dallas, Uvalde y Laguna Woods.

Por Sakshi Venkatraman y Char Adams - NBC News

El país seguía conmocionado por un tiroteo mortal atribuido a un presunto supremacista blanco en Buffalo, Nueva York, un tiroteo contra mujeres coreanas en Dallas y los asesinatos en una iglesia taiwanesa de Laguna Woods, California, cuando un hombre armado mató el martes a al menos 19 niños y dos profesoras en Uvalde, Texas. 

Las comunidades negra y asiática-americana y de las islas del Pacífico muestran su solidaridad con la población latina de Uvalde en un momento en el que los llamamientos para proteger a las poblaciones más desfavorecidas de Estados Unidos son cada vez más urgentes. Los residentes latinos e hispanos constituyen el 72.7% de la población del condado de Uvalde, según los datos del censo

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“Espero que podamos aprovechar este momento para apoyarnos unos en otros”, declaró Chas Moore, fundador de la Austin Justice Coalition, una organización de justicia social dirigida por personas negras. “La comunidad negra acaba de pasar por el terrible crimen de odio que ocurrió en Buffalo. Ahora la comunidad latina está pasando por esto. Nuestras comunidades están de luto”, agregó.

Los líderes de los derechos civiles de todas las comunidades se han estado enviando mensajes de texto y correos electrónicos desde los tiroteos de Dallas y Búfalo de este mes, según John C. Yang, presidente y director ejecutivo de Asian Americans Advancing Justice.

“Incluso después de los tiroteos de Buffalo, Laguna Woods y Dallas, todas nuestras comunidades han estado hablando entre sí por texto, teléfono móvil y correo electrónico”, detalló. 

Con cada tiroteo surge una nueva discusión, y las constantes comunicaciones a menudo se sienten sombrías. 

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“Esas conversaciones han sido de enfado, tristeza y frustración”, dijo. “Cuando nos ponemos al teléfono unos con otros, todos reconocemos 'aquí vamos de nuevo'. Porque no es la primera vez que tenemos estas conversaciones", recordó.

Discusiones similares, así como comunicaciones conjuntas dirigidas a la Casa Blanca, han tenido lugar después de los tiroteos en balnearios de propiedad asiática en Atlanta; un Walmart en El Paso, Texas; la iglesia baptista Emanuel AME en Charleston, Carolina del Sur; y la sinagoga del Árbol de la Vida en Pittsburgh. “La lista es interminable”, señaló.

Hair World Salon en Dallas, Texas, el 15 de mayo de 2022.
Hair World Salon en Dallas, Texas, el 15 de mayo de 2022.Raul Rodriguez / NBC News

“A un nivel muy básico, pediría a la gente que se acerque a sus amigos y vecinos en las diferentes comunidades que se han visto afectadas”, pidió Yang. “Simplemente abran esa conversación y sean valientes en su malestar. Reconocemos que algunas de estas conversaciones serán duras e incómodas, pero tenemos que tene rlas", añadió.

Las autoridades explicaron que un hombre de 18 años se atrincheró en un aula de la escuela primaria Robb en Uvalde y abrió fuego contra estudiantes y profesores.

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Uvalde, a unos 51.5 millas (83 kilómetros) al oeste de San Antonio, se encuentra en una región con una gran población mexicano-americana, y alrededor del 87% de los estudiantes de la escuela se consideran económicamente desfavorecidos. 

Yang dijo que la violencia contra tres comunidades pone de relieve los peligros de existir como minoría en Estados Unidos.  

"No hace más que subrayar la necesidad desesperada de trabajar juntos y encontrar soluciones", apuntó. 

Desde la masacre, las fotos de las víctimas se han compartido en línea, los grupos han creado numerosas recaudaciones de fondos para apoyar a las familias de las víctimas, y los llamamientos a leyes de armas más estrictas han comenzado a dominar el debate nacional.

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Moore dijo que mientras la Coalición por la Justicia de Austin discute formas concretas de apoyar a la comunidad que se encuentra a menos de tres horas de distancia, espera que la tragedia genere aún más solidaridad. 

“Esto puede ocurrir en cualquier lugar. Después del duelo, espero que las comunidades negras y de color puedan organizarse para luchar por las leyes de seguridad de las armas. Algo tiene que cambiar”, opinó Moore. 

La indignación por la relajación de las leyes de armas en Texas ha seguido al tiroteo en la escuela primaria, especialmente porque el gobernador Greg Abbott firmó siete leyes el pasado mes de junio para ampliar los derechos de las armas. Una de las leyes permite a la gente llevar armas de mano sin licencia.

Mientras que mucha gente ha culpado del tiroteo, en parte, a la falta de leyes de control de armas del estado, los expertos, que han dicho que ese no era el caso en Buffalo, han atribuido los asesinatos a la historia de terror racista del país.  

Bobby Blount, portavoz del Fondo Comunitario Afroamericano del Área de San Antonio, anunció que la organización está dispuesta a hacer todo lo posible para apoyar a la comunidad latina en Uvalde. 

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“Tenemos que continuar con la misión de hacer el mundo mejor para nuestra demografía, la demografía Latinx, para los asiáticos y otros”, dijo Blount. “Es importante que no sólo nos apoyemos mutuamente en esto, sino en otros asuntos a los que nos enfrentamos en general”, afirmó.

Y como la violencia con armas de fuego afecta a tres comunidades distintas, la solidaridad entre ellas no adopta una única forma, dijo Manju Kulkarni, cofundadora de la organización de derechos civiles Stop AAPI Hate. 

Una persona pasa por delante de la escena de un tiroteo en un supermercado, en Buffalo, Nueva York, el 15 de mayo de 2022.
Una persona pasa por delante de la escena de un tiroteo en un supermercado, en Buffalo, Nueva York, el 15 de mayo de 2022.Matt Rourke / AP

“Implica, como mínimo, reconocer lo que les ocurre a otras comunidades, ver que el odio contra los afroamericanos es similar pero también diferente de lo que experimentan nuestras comunidades asiático-estadounidenses e isleños del Pacífico (AAPI, por su sigla en inglés)”, dijo.

Las soluciones políticas no pueden ser unilaterales y los líderes deben presentar una legislación que beneficie a todas las comunidades de color. Kulkarni reconoció que las comunidades minoritarias pueden sentirse silenciadas y desesperadas cuando se trata de crear un cambio.

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Diecinueve estados promulgaron restricciones al voto el año pasado. Los expertos creen que las medidas empeorarán el acceso a las urnas para la gente de color. 

“Entiendo que ahora mismo la gente sienta que el Gobierno es inepto”, dijo. “Esto es lo que tenemos, esta es la forma de compartir nuestra voz colectiva, pero la democracia tiene que funcionar”, añadió.

Para aquellos que no tienen plataformas nacionales para hacer frente a la violencia, la solidaridad puede ser tan simple como comprobar cómo están sus seres queridos, donar a operaciones de ayuda mutua o expresar abiertamente su ira, según los activistas.