Por Ben Kamisar – NBC News
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó este jueves una nueva ley electoral que introduce restricciones al voto por correo y en buzones, lo que los demócratas y activistas advierten que podría suprimir la participación de votantes.
DeSantis firmó el proyecto de ley, aprobado por los legisladores republicanos el mes pasado, durante una entrevista en un programa de la cadena Fox News. El gobernador ha celebrado a lo largo de la semana ceremonias más formales de firma de otros proyectos de ley en todo el estado.
El dirigente republicano argumentó que esta ley protege la "integridad y la transparencia" de las votaciones de Florida y que, después de las elecciones de 2020, que fueron exitosas, los cambios mantendrán al estado "a la vanguardia", haciéndose eco del mensaje que su partido ha utilizado durante meses para rechazar las críticas a esta legislación.
"Creemos que esto hará que sea aún mejor a medida que avancemos, así que estamos orgullosos de los avances que hemos hecho, pero no nos dormimos en los laureles", dijo.
La firma de DeSantis promulga una serie de cambios en las leyes electorales de Florida, incluyendo límites en los lugares donde se pueden colocar buzones; restricciones sobre quién puede dejar la boleta de un votante; un mandato de que los buzones tengan personal mientras están abiertos, nuevos poderes para los observadores electorales de los partidos; así como un requisito de que los votantes deben solicitar votar por correo con más frecuencia.
El gobernador ha ganado protagonismo durante la pandemia del COVID-19, sobre todo en los círculos conservadores, donde se le ve como uno de los principales republicanos que compiten por una futura candidatura presidencial. El programa Fox & Friends de la cadena Fox News se ha convertido en un pilar para los políticos republicanos, y un programa que el expresidente Donald Trump ha elogiado.
Las nuevas medidas entrarán en vigor inmediatamente, a tiempo para los comicios locales, las elecciones especiales a la Cámara de Representantes para reemplazar al difunto representante demócrata Alcee Hastings, y las legislativas de 2022, que también decidirán el gobernador de este estado.
Los cambios tienen implicaciones específicas para las elecciones especiales para el escaño de Hastings. Además, también incluyen un cambio en la ley estatal de "renuncia a postularse" que permitirá a DeSantis nombrar a los reemplazos para ocupar los escaños que queden vacantes por algunos funcionarios locales que quieran postularse para ese escaño en el Congreso. Durante el debate en la legislatura el mes pasado, los demócratas enmarcaron esa parte de la legislación como un abuso de poder.
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Los demócratas también han apuntado a los cambios más amplios, uniéndose a los grupos de derechos de voto para presentar los cambios como una venganza política después de que los demócratas registraron una fuerte participación en el voto por correo en las elecciones de 2020, y argumentando que las restricciones tendrán un gran efecto en los votantes de minorías.
La ley "busca silenciar las voces de los votantes basándose en su aspecto o en su procedencia", escribieron activistas de los derechos civiles y del voto de más de 20 grupos locales y nacionales en una carta enviada a DeSantis antes de su firma.
Añadieron que los votantes negros tienen más probabilidades de trabajar más horas, vivir en hogares más grandes y "depender de las campañas de registro de votantes de la comunidad para acceder a la votación, lo que hace que estas restricciones sean especialmente injustas".
El representante demócrata de Florida Charlie Crist, que anunció su candidatura a gobernador esta semana, calificó la ley de "patética".
La Liga de Mujeres Votantes de Florida, Black Voters Matters Fund, la Alianza de Jubilados de Florida y otras organizaciones anunciaron poco después de que el proyecto se convirtiera en ley que iban a presentar una demanda judicial, argumentando que viola los derechos constitucionales de los floridanos.
Florida es el último estado hasta el momento liderado por republicanos en aprobar nuevas restricciones al voto meses después de que el expresidente Donald Trump comenzara a hacer afirmaciones falsas e infundadas de que las elecciones de 2020 fueron robadas.
Georgia aprobó sus propias restricciones en marzo, lo que provocó una reacción de los demócratas y los activistas que finalmente dio lugar a que grandes empresas denunciaran la medida y a que las Grandes Ligas de Béisbol trasladaran el Juego de las Estrellas fuera del estado. El impulso de nuevas restricciones al voto en Texas también ha llevado a las empresas a pronunciarse. Pero hasta ahora, en Florida han permanecido en silencio.