En los últimos 10 años el crecimiento poblacional se desaceleró a su segunda tasa más lenta en la historia del país, solo superada por el lento crecimiento de la década de 1930, según datos revelados por la Oficina del Censo este lunes.
En términos de población total, el censo contó 331,449,281 personas, un aumento del 7.4% respecto al censo de 2010 y la tasa más baja de aumento poblacional desde 1930. California sigue siendo el estado más poblado, mientras que Wyoming mantiene su posición como el menos.
Como resultado, en la designación de escaños en el Congreso, que se distribuyen de manera equitativa entre cada estado según la población que arroja el censo, solo se movieron de lugar siete escaños entre 13 estados.
Texas fue el gran ganador, agregando dos nuevos escaños en la Cámara Baja tras un imponente crecimiento poblacional de más de 4 millones de residentes en la última década, más que cualquier otro estado en números absolutos.
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Colorado, Montana, Oregon, Florida y Carolina del Norte obtuvieron un escaño respectivamente. Mientras que los estados que perdieron representación política estuvieron concentrados en el Medio Oeste: Illinois, Michigan, Pennsylvania, West Virginia y Ohio perdieron un asiento cada uno.
California y Nueva York, dos bastiones demócratas, también perdieron un asiento cada uno.
Ahora Texas cuenta con 29 millones de residentes, el segundo estado más poblado del país después de California, con casi 40 millones de habitantes.
El censo decenal, que es una obligación constitucional, no solo determina el número de escaños que obtiene cada estado en la Cámara de Representantes, sino también el número de delegados que cada entidad envía al Colegio Electoral para votar por el presidente.
Los datos del ejercicio de 2020 fueron anunciados por Ron Jarmin, director interino de la Oficina del Censo, luego de meses de retrasos ocasionados por la pandemia de coronavirus. Sin embargo, la información no ha sido desglosada a nivel de grupos demográficos ni se han presentado los datos completos.
Los datos demográficos que se publicarán a finales de este año ayudarán a determinar cómo se distribuye el presupuesto federal para invertir en carreteras, escuelas y otros proyectos de obras públicas alrededor de todo el país.
El anuncio de la Oficina del Censo se produce después de la controversia que provocó la Administración Trump cuando trató de excluir a los inmigrantes indocumentados del Censo 2020. El presidente, Joe Biden, revocó esa directiva poco después de asumir el cargo. También eliminó una orden de Trump que requería a la Oficina del Censo recopilar información de ciudadanía sobre cada residente del país, algo que el exmandatario instituyó después de que la Corte Suprema rechazara su intento por incluir una pregunta en el cuestionario del censo sobre ciudadanía.
Además de las batallas legales, la pandemia también retrasó el calendario del Censo 2020.
El año pasado, se pospuso el plazo para terminar el conteo de finales de julio hasta fines de octubre. Luego, en el verano pasado, la agencia anunció que la fecha límite se cambiaría para fines de septiembre, un mes antes.
La Oficina del Censo no cumplió con el plazo del 31 de diciembre para entregar los datos para llevar a cabo la designación de escaños en el Congreso y siguió posponiendo las fechas para publicarla información después de que se encontraron irregularidades en los datos.
Con información de NBC News y The Associated Press.