Por Simina Mistreanu — The Associated Press
El terremoto más fuerte en 25 años sacudió Taiwán con magnitud 7.4 durante la hora pico de la mañana del miércoles, acabando con la vida de al menos nueve personas, hiriendo a casi un millar y atrapando a varias decenas en canteras derrumbadas. Provocó además una alerta de tsunami, que se canceló sin incidentes. El sismo, cuyo epicentro se registró frente a la costa del condado rural de Hualien, dejó imágenes de ciudadanos que huían incluso por las ventanas, y de edificios que quedaron inclinados pero sin colapsar.
Taiwán es una isla con actividad sísmica que ha sufrido ya fuertes sismos, pero el costo en vidas humanas para sus 23 millones de habitantes ha sido hasta ahora relativamente bajo gracias a su excelente nivel de preparación contra terremotos, dicen expertos.
¿Por qué tantos temblores?
Taiwán se encuentra en el Anillo de Fuego del Pacífico, la línea de fallas sísmicas que rodea ese océano y donde ocurren la mayoría de los terremotos del mundo. Es una zona particularmente vulnerable debido a la tensión acumulada por las interacciones de dos placas tectónicas, la Placa del Mar de Filipinas y la Placa Euroasiática, que pueden causar sismos por las repentinas liberaciones de tensión.
El paisaje montañoso de la región puede amplificar los temblores del suelo y provocar deslizamientos de tierra. Varios de ellos ocurrieron en la costa oriental de Taiwán, cerca del epicentro del terremoto del miércoles, derrumbando escombros sobre túneles y carreteras, aplastando vehículos, y causando varias muertes.
¿Por qué está tan bien preparado Taiwán?
El terremoto tuvo una magnitud de 7.2, según la agencia local, o de 7.4 según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, en inglés). Dañó varios edificios en Hualien, pero sólo causó pérdidas menores en la capital, Taipei, a pesar de que allí se sintió con mucha fuerza.
El terremoto se produjo en plena hora pico de la mañana, pero sólo alteró ligeramente el transporte habitual. Minutos después, padres volvían a acompañar a sus hijos a la escuela, y los trabajadores se dirigían a lugares de empleo.
“La preparación de Taiwán para terremotos se encuentra entre las más avanzadas del mundo”, explicó Stephen Gao, sismólogo de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Missouri, “tiene códigos de construcción estrictos, una red sismológica de calidad internacional y campañas de educación pública generalizadas sobre seguridad".
El Gobierno revisa continuamente el nivel de resistencia sísmica de los edificios nuevos y existentes (lo que puede aumentar los costos de construcción), y ofrece subsidios a los residentes que deseen comprobarla en sus edificios.
Tras un terremoto de 2016 en Tainan, en la costa suroeste de la isla, cinco personas involucradas en la construcción de un edificio de apartamentos de 17 pisos que fue la única estructura importante que se derrumbó, matando a decenas, fueron declaradas culpables de negligencia y encarceladas.
Taiwán también está impulsando simulacros en escuelas y lugares de trabajo, mientras que los medios públicos y los teléfonos móviles transmiten periódicamente avisos sobre terremotos y seguridad.
“Estas medidas han mejorado significativamente la resiliencia de Taiwán a los terremotos, ayudando a mitigar el potencial de daños catastróficos y pérdida de vidas”, agregó Gao.
Vivir bajo la sombra de terremotos
Taiwán y sus aguas circundantes han registrado alrededor de 2,000 terremotos con una magnitud de 4 o mayor desde 1980, y más de 100 con una superior a 5.5, según el USGS.
El peor terremoto ocurrido en la isla en los últimos años se produjo el 21 de septiembre de 1999, con una magnitud de 7.7. Causó 2,400 muertos, cerca de 100,000 heridos, y destruyó miles de edificios.
El último terremoto mortal en el condado de Hualien, en 2018, derrumbó un hotel histórico y otros edificios.
"Por desgracia, este alto nivel de actividad sísmica continuará durante millones de años”, afirmó Gao, “Eso subraya la importancia de la preparación y resiliencia frente al riesgo sísmico actual".