Cómo cambian los hábitos de sueño a medida que envejecemos

Cómo cambian los hábitos de sueño a medida que envejecemos

COMPARTE ESTO —

Por Gizmodo


Si no duermes tan bien como hace unos años, tranquilo. Es muy probable que no sea nada más que la edad. Nuestros hábitos de sueño cambian a medida que nos hacemos mayores. Muchos estudios lo han investigado y han llegado a datos y conclusiones interesantes. Ahí va un resumen muy útil.

Centros como el Harvard Medical School o el Stanford Sleep Epidemiology Research Center han investigado en las últimas décadas la relación entre el envejecimiento y los hábitos de sueño. El divulgador y emprendedor James Clear ha buceado ahora en algunos de ellos, en concreto 65 estudios realizados entre 1960 y el 2003 en más de 3.500 individuos, para extraer algunas conclusiones. Las puedes ver resumidas en la tabla debajo de un vistazo. ¿Las más importantes?

A medida que nos hacemos mayores, nos cuesta más quedarnos dormidos, aunque la mayor diferencia es que nos despertamos bastante antes: de media solo dormimos 5,8 horas a los 80 años frente 7,5 horas cuando tenemos 20.

La calidad del sueño también se resiente, con solo un 17% del tiempo durmiendo en fase REM cuando tenemos 80 años frente a un 22% a los 20. Y otra diferencia importante: la fase de sueño de ondas lentas (slow wave sleep), asociada con la ayuda a la regeneración de tejidos y reparación del sistema inmunológico, también decrece de forma importante.

Es algo inevitable, pero está bien saberlo. Y también conocer que hay formas para minimizar el impacto de estos cambios de sueño. Por ejemplo, con pequeñas siestas durante el día. Y no todas son iguales.

Según varios estudios, una siesta de entre 10 y 20 minutos es perfecta para recargar pilas y, por ejemplo, volver renovado al trabajo. Una de 60 minutos ayuda a los procesos de memoria cognitiva, ya que entramos en fase de sueño de ondas lentas. Y una siesta de 90 minutos implica el ciclo completo de sueño, lo que ayuda a mejorar nuestro estado emocional y la creatividad. Puedes ver más detalles en la tabla debajo elaborada hace un tiempo por el Wall Street Journal, o en este reportaje. [vía James Clear y WSJ]