El compromiso de Nueva York como ciudad santuario para la protección de los inmigrantes tiene reflejo en los datos de la policía sobre las peticiones de detención de alguno de ellos recibidas desde el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés).
La policía de la ciudad rechazó todas las 2.916 solicitudes de retención de inmigrantes más allá del tiempo pasado en custodia en su propio departamento enviadas desde la Migra entre el 1 de julio de 2018 y el 30 de julio de este año. Lo mismo pasó con las 3.314 peticiones de los 21 meses anteriores. La última vez que sí aceptó alguna solicitud de este tipo (en dos casos) fue en el periodo incluido entre octubre de 2015 y septiembre de 2016.
Este domingo, el periódico New York Daily News fue el primer medio en dar noticia de que habían salido nuevos datos respecto al periodo entre julio 2018 y 2019. Las estadísticas se pueden consultar aquí. En la misma web, se pueden leer las cifras relativas a periodos anteriores.
Las peticiones de ICE del último año reflejado en estos datos fueron 625 más que en los 12 meses anteriores (de julio 2017 a junio 2018). Lo que corresponde a un aumento de un 27%.
Entre el verano de 2018 y el en curso, la policía de Nueva York negó todas las solicitudes de mantener a los inmigrantes detenidos para que ICE pudiera decidir si abrir un proceso de deportación, así como no transfirió a ninguna de las personas objeto de la petición a la autoridad federal.
En siete de estos casi 3.000 casos, la policía contestó a preguntas de ICE acerca de la situación judicial de la persona involucrada, como el estado de detención, la fecha prevista de liberación y las de eventuales comparecencias ante una corte.
Se trata de inmigrantes con al menos una condena por un crimen violento o serio. En ningún caso estas personas fueron trasladadas a las autoridades de inmigración, precisa la policía. El año anterior, los casos en los que facilitó a ICE respuestas sobre la situación judicial de una persona fueron cinco.
La posición de las autoridades locales
Como destaca el Daily News, el alcalde demócrata de Nueva York, Bill de Blasio, limitó considerablemente la colaboración de la ciudad con las autoridades federales en tema de inmigración. Una portavoz de la policía aseguró que esta no se dedica a “la aplicación de las leyes civiles de inmigración”.
La organización sin ánimo de lucro Legal Aid Society celebró la situación que reflejan estos datos. “La policía de Nueva York está respetando la ley de detención de la ciudad, que tiene la intención de limitar las circunstancias bajo las cuales nuestra policía local ejecuta una detención de ICE o coopera con las autoridades federales de inmigración”, reza un comunicado de esta entidad.
“Que la policía local retenga a un individuo debido a una petición de detención de ICE es evidentemente ilegal. Estas solicitudes conducen a la detención de miles de personas cada año sin motivo probable, sin aprobación judicial y sin las protecciones básicas necesarias", agrega.
Un portavoz de ICE dijo al Daily News que la actitud de la policía de Nueva York afecta negativamente “la seguridad pública y la eficiencia de ICE en la detención de extranjeros criminales” y recordó que las leyes federales otorgan a esta autoridad de inmigración “amplia facultad de intervención” para detener a extranjeros que pueden ser deportados.
En mayo, el alcalde De Blasio dio a conocer que planeaba aumentar los casos en los que las personas arrestadas por la policía local terminen entregadas a ICE para su deportación. La idea era incrementar de 170 a 177 los delitos violentos por los que se permitiría el traslado de un inmigrante a las autoridades federales, incluyendo crímenes como el tráfico sexual de personas y la prostitución de menores.
El cambio no requiere de la aprobación de los concejales puesto que ha sido tramitado como una actualización de la ley de 2014 que contiene el listado original de 170 delitos. No entrará en vigor hasta enero, una vez sea sometido a revisión pública.
La comisionada de Inmigración, Bitta Mostofi, afirmó que se trata de un cambio “burocrático” que “equivale a un incremento cero o muy nominal en la cooperación” con ICE.
Las ciudades más seguras
Pese a todo, vivir en una ciudad santuario reduce las posibilidades para que un inmigrante sea detenido por ICE, según el Centro de Información de Acceso a Registros Transaccionales (TRAC) de la Universidad de Syracuse.
La diferencia radica en las herramientas que las autoridades migratorias tienen para ubicar, arrestar, procesar y deportar a un indocumentado.
Estos factores van ligados con la colaboración y coordinación que ICE recibe de las autoridades locales, sea bajo el programa 287(g) o por la falta de colaboración vinculada a las ciudades santuario.
Los datos analizados prueban que vivir en Los Ángeles, Nueva York o Chicago “significa una posibilidad mucho menor de deportación en comparación con quienes viven en Dallas, Texas, el condado de Orange en California, o Phoenix.
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