Por Ginger Gibson - NBC News
El expresidente Donald Trump dijo el sábado que los inmigrantes que llegan a Estados Unidos están "envenenando la sangre de nuestro país", un comentario que rápidamente fue criticado por el presidente, Joe Biden, su principal rival demócrata, cuyo equipo de campaña comparó las palabras del exmandatario con las de Adolf Hitler.
"Dejaron entrar en nuestro país a 15 o 16 millones de personas. Cuando hacen eso, tenemos mucho trabajo que hacer. Están envenenando la sangre de nuestro país", dijo Trump a una multitud de simpatizantes en un mitin celebrado en New Hampshire. "Eso es lo que han hecho. Envenenan los psiquiátricos y las cárceles de todo el mundo, no sólo de Sudamérica, no sólo de tres o cuatro países en los que pensamos, sino de todo el mundo. Están entrando en nuestro país desde África, desde Asia, por todo el mundo".
A continuación, Trump repitió el uso del término "envenenando" en un post publicado en Truth Social, su plataforma de redes sociales, diciendo en mayúsculas, que "la inmigración ilegal está envenenando la sangre de nuestra nación. Vienen de prisiones, de instituciones psiquiátricas... de todo el mundo".
El término "envenenamiento de la sangre" fue utilizado por Hitler en su manifiesto Mein Kampf, en el que criticaba la inmigración y la mezcla de razas. "Todas las grandes culturas del pasado perecieron sólo porque la raza originalmente creativa murió envenenada por la sangre", escribió Hitler.
La campaña de Biden emitió un comunicado criticando duramente las declaraciones de Trump.
"Donald Trump canalizó sus modelos de conducta cuando repitió como un loro a Adolf Hitler, elogió a Kim Jong Un y citó a Vladimir Putin mientras se postulaba a la presidencia con la promesa de gobernar como un dictador y amenazar la democracia estadounidense. Trump no reniega de su plan de encerrar a millones de personas en campos de detención y sigue mintiendo sobre aquella vez en la que Joe Biden lo aniquiló por más de 7 millones de votos hace tres años", dijo el equipo de campaña de Biden.
Chris Christie, uno de los rivales de Trump en la campaña por la nominación presidencial republicana, calificó sus declaraciones como "repugnantes" en State of the Union, el programa de CNN.
"Es repugnante, y lo que está haciendo es incitar a los estadounidenses que se sienten muy estresados y tensos por la economía y por los conflictos en todo el mundo, y trata de culpar de eso a personas de otras regiones que no se parecen a nosotros", dijo Christie. "El otro problema son los republicanos que dicen que esto está bien".
A continuación, criticó a su compañera y rival republicana Nikki Haley por decir que Trump es apto para ser presidente.
"Me está diciendo que alguien que dice que los inmigrantes están envenenando la sangre de este país, alguien que dice que Vladimir Putin es un testigo de su carácter, es apto para ser presidente de Estados Unidos, y que era la persona adecuada en el momento adecuado. Nikki Haley debería avergonzarse de sí misma. Ella es parte del problema porque lo está permitiendo".
"No está bien que un presidente estadounidense diga estas cosas", añadió Christie.
La campaña de Trump no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre las críticas que lo comparan con Hitler.
Trump ha convertido las críticas a la gestión de la frontera sur de Estados Unidos en un punto central de su campaña y, con frecuencia, habla sobre el flujo de inmigrantes a Estados Unidos.
Los aliados de Trump en el Congreso han hecho de la inmigración una de sus principales prioridades y exigen que se creen nuevas políticas para gestionar la frontera antes de que los republicanos aprueben financiamiento adicional para Ucrania o Israel, que están librando guerras con el respaldo de EE.UU. Aunque los legisladores aún no han llegado a un acuerdo, son optimistas ante la posibilidad de llegar a un acuerdo que imponga muchas de las medidas fronterizas que piden los republicanos y que sea firmado por Biden.
No es la primera vez que Trump invoca el término "envenenamiento de la sangre" para criticar la inmigración. A principios de este año, también lo dijo en una entrevista en la que criticaba la inmigración.
En una entrevista en el programa Meet the Press de NBC News, el senador Lindsey Graham rechazó la idea de que la retórica de Trump fuera un problema cuando se le preguntó por su uso del término "envenenamiento de la sangre".
"Estamos hablando de lenguaje. Me importa un bledo el lenguaje que use la gente mientras lo hagamos bien", dijo Graham. "Creo en la inmigración legal. No tengo animadversión hacia la gente que intenta venir a nuestro país. Tengo animadversión contra los terroristas y contra los traficantes de drogas".
Cuando se le volvió a preguntar al respecto, añadió que no estaba de acuerdo con las palabras que usó.
"A veces, el expresidente tiene una forma de hablar con la que no estoy de acuerdo", dijo Graham.