Por Scott Wong - NBC News
WASHINGTON — Los principales republicanos del Congreso apoyaron a Donald Trump este jueves por la noche, enmarcando la acusación contra el expresidente como una táctica del presidente, Joe Biden, de usar al Departamento de Justicia “como arma” contra su más probable oponente político para 2024.
“Es inconcebible que un presidente acuse al principal candidato que se le opone. Joe Biden guardó documentos clasificados durante décadas”, tuiteó el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, quien es leal a Trump. “Yo y todos los estadounidenses que creen en el Estado de derecho, estamos con el presidente Trump contra esta grave injusticia”.
“Los republicanos de la Cámara de Representantes exigirán consecuencias por esta descarada utilización del poder como arma”, escribió McCarthy.
La acusación del jueves surgió de una investigación del fiscal especial Jack Smith, nombrado por el fiscal general Merrick Garland. Garland ha sido muy cuidadoso en no involucrarse en la investigación y ha dicho que Smith tomaría sus propias decisiones sobre la acusación. Biden también ha subrayado su distanciamiento de la investigación y la Casa Blanca declaró que se enteró de los cargos contra Trump a través de los medios de comunicación.
Sin embargo, muchos republicanos aliados del expresidente se hicieron eco de McCarthy. El jefe de la mayoría, el republicano Steve Scalise, la calificó de “acusación farsa”.
“Seamos claros sobre lo que está pasando: Joe Biden está armando a su Departamento de Justicia contra su propio rival político”, afirmó.
Y la presidenta de la Conferencia del Partido Republicano de la Cámara de Representantes, la republicana Elise Stefanik, que dirige la operación de mensajería, señaló en un comunicado que la acusación contra el expresidente “es el epítome del empleo ilegal y sin precedentes del Gobierno federal como arma contra el principal oponente de Joe Biden, Donald J. Trump”.
Al otro lado del Capitolio, el mensaje de los principales aliados de Trump fue similar. El senador J.D. Vance, republicano por Ohio, respaldado por Trump en las elecciones de 2022, acusó a Biden de intentar “robar” las próximas elecciones.
“Biden está atacando a su más probable oponente de 2024”, tuiteó Vance. “Está usando el sistema judicial para robar preventivamente las elecciones de 2024. Esto es lo que está pasando, simple y llanamente”.
Pero el líder de la minoría del Senado Mitch McConnell, republicano por Kentucky; el jefe de la minoría John Thune, republicano por Dakota del Sur y los miembros del equipo de liderazgo republicano del Senado permanecieron en notable silencio.
Poco después de que Trump anunciara en su red social, Truth Social, que había sido acusado, NBC News confirmó que el expresidente fue imputado por un gran jurado federal en Florida por siete cargos relacionados con su mal manejo de documentos clasificados.
Varios legisladores del Partido Republicano afirmaron que este jueves recibieron mensajes de texto de la operación de mensajería política de Trump que incluían tanto la publicación en Truth Social como su mensaje de video en el que declara ser inocente.
“Es una interferencia electoral al más alto nivel. Nunca ha ocurrido nada parecido. Soy un hombre inocente. Soy una persona inocente”, aseguró Trump en el vídeo.
El equipo de Trump está vigilando de cerca qué miembros de la cúpula le han defendido en Twitter, según las fuentes.
Los demócratas, mientras tanto, dijeron que la acusación de Trump -los primeros cargos penales federales contra un exmandatario- debería dar a los estadounidenses fe en el sistema judicial.
El representante Dan Goldman, demócrata por Nueva York, un exfiscal federal que fue el abogado principal en la primera investigación de destitución de Trump en la Cámara, elogió a Smith en un comunicado, llamándolo “un fiscal de carrera de la mayor integridad".
Estados Unidos se fundó sobre el principio de que “ninguna persona, ni siquiera un expresidente, está por encima de la ley”, recordó.
El representante Jamie Raskin, demócrata por Maryland, el miembro de mayor rango en el Comité de Supervisión y el principal gestor del segundo juicio político de Trump, contraatacó al Partido Republicano.
“La peligrosa retórica sobre un ‘sistema de justicia de dos niveles’ -que discrimina nada menos que a los ricos- para apuntalar al expresidente dos veces destituido no solo socava al Departamento de Justicia, sino que traiciona el principio esencial de la justicia de que nadie está por encima de los mandatos de la ley, ni siquiera un expresidente o un multimillonario autoproclamado”, señaló en un comunicado.
Raskin prometió continuar con la supervisión, diciendo que los demócratas están “decididos a entender todo el alcance de la posesión ilegal de Trump de cientos de documentos del Gobierno y sus ofensas contra nuestro gobierno y nuestro pueblo".