Las fuerzas terrestres israelíes bombardearon el norte de Gaza el viernes, lo que representa una importante escalada del conflicto entre Israel y los militantes palestinos, que se acercan a la guerra total.
La artillería israelí buscaba destruir una vasta red de túneles de palestinos en el interior del territorio, según el Ejército.
Los bombardeos aéreos y de artillería del viernes constituyeron "los ataques más intensos hasta la fecha", informó la agencia de noticias The Associated Press desde Gaza. Israel está llamando a 9,000 soldados de reserva antes de una posible invasión terrestre del territorio gobernado por Hamás.
Los ataque obligaron a las familias palestinas a agarrar a sus hijos y sus pertenencias y huir de los barrios de las afueras de la ciudad de Gaza el viernes. Llegaron a las escuelas gestionadas por la ONU en la ciudad en camionetas, en burros y a pie, transportando almohadas y sartenes, mantas y pan.
"Teníamos previsto salir de nuestras casas por la noche, pero los aviones israelíes nos bombardearon y tuvimos que esperar hasta la mañana", dijo Hedaia Maarouf, que huyó con su familia ampliada de 19 personas, incluidos 13 niños. "Estábamos aterrorizados por nuestros hijos, que gritaban y temblaban", añadió.
Los militantes palestinos han disparado unos 1,800 cohetes, y el Ejército israelí ha lanzado más de 600 ataques aéreos, derribando al menos tres edificios de departamentos de gran altura.
Mientras Israel y Hamás se acercaban a una guerra total a pesar de los esfuerzos internacionales por lograr un alto el fuego, la violencia comunitaria en Israel estalló por cuarta noche. Turbas judías y árabes se enfrentaron en la ciudad de Lod, un punto conflictivo, incluso después de que Israel enviara más fuerzas de seguridad.
El balance de los enfrentamientos se eleva a 119 muertos, entre ellos 31 niños y 19 mujeres, y 830 heridos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. Los grupos militantes de Hamás y la Yihad Islámica han confirmado 20 muertes en sus filas, aunque Israel dice que esa cifra es mucho mayor. En Israel han muerto siete personas, entre ellas un niño de 6 años y un soldado.
El Ejército de Israel anunció este jueves que sus Fuerzas Armadas estaban llevando a cabo un ataque por tierra contra territorios palestinos de la Franja de Gaza, una acción bélica que supone una importante escalada de violencia tras los mortales bombardeos aéreos y de la artillería israelí de los últimos días.
Por su parte, el presidente, Joe Biden, pidió que se redujera la violencia y dijo que esperaba mantener más conversaciones con los líderes de la región.
Inicialmente, el Ejército había dicho que las fuerzas terrestres israelíes habían ingresado a la Franja de Gaza, pero luego se retractó de esa declaración.
Un portavoz militar israelí, el teniente coronel Jonathan Conricus, aclaró que las tropas israelíes no habían entrado por tierra, lo que sugiere la posibilidad de que los ataques se hayan llevado a cabo con fuego de artillería desde el exterior. Conricus no proporcionó más detalles.
“Actualmente hay fuerzas terrestres desplegadas a lo largo de la zona fronteriza y desde allí se están enfrentando y atacando a la Franja de Gaza”, dijo Conricus.
Por ahora se desconoce si la incursión israelí es un intento limitado por destruir las bases desde las que se han estado lanzando cohetes contra su territorio, o de matar a líderes de Hamás, la organización palestina (considera terrorista por Israel y otros países aliados) que controla Gaza; o si por el contrario se trata de una invasión como la ocurrida en 2014, que causó la muerte a más de 2,000 palestinos.
El Ejército de Israel no dio más detalles sobre la operación, pero en los últimos días se han reunido entre 3,000 y 4,000 soldados en la frontera, según funcionarios militares. Esas cifras sugieren una operación más limitada porque una invasión a gran escala requeriría muchas más tropas.
"Dije que le cobraríamos un precio muy alto a Hamás y al resto de las organizaciones terroristas", declaró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en un comunicado emitido poco después de que comenzara la ofensiva. “Estamos haciendo esto y seguiremos haciéndolo con mucha fuerza. Esta operación continuará mientras sea necesario para restaurar la paz y la seguridad en el Estado de Israel", agregó.
Hamás lanzó una gran cantidad de misiles hacia Israel el jueves, mientras que los israelíes azotaron la Franja de Gaza con más ataques aéreos y artillería, y además convocaron a miles de reservistas para la incursión por tierra de este viernes en la madrugada (hora local).
Los combates anteriores entre Israel y el grupo islamista Hamás, incluida una devastadora guerra en 2014, habían estado limitados en gran medida al empobrecido y bloqueado territorio palestino de la Franja de Gaza y a las comunidades israelíes fronterizas. Pero esta vez el conflicto parece extenderse a sitios más lejanos y de manera más amplia que en cualquier otro momento desde el alzamiento palestino del 2000.
Las hostilidades se han intensificado en los útimos días a pesar de las gestiones de mediadores egipcios que sostuvieron reuniones en persona con ambas partes.
Los ataques anunciados este jueves Ejército de Israel llegan luego de varios días de enfrentamientos. Desde el lunes, Israel ha golpeado más de 600 objetivos que describió como pertenecientes a Hamás, así como armamento e infraestructura de la Jihad Islámica Palestina, y ha matado a más de 30 militantes, según el teniente coronel Jonathan Conricus, un portavoz militar israelí.
Un portavoz del ala militar de Hamás restó importancia a las incursiones de Israel. “El enemigo lleva a cabo incursiones de espectáculo dirigidas al sabotaje y la destrucción”, dijo. "No afectará las capacidades de la resistencia".
Con infomación de The Associated Press y NBC News.