Tras haber impactado en la Península de Yucatán, donde causó inundaciones y daños económicos, Delta recobró fuerzas este jueves en la tarde rumbo a Louisiana sobre las cálidas aguas del Golfo de México. De acuerdo con el más reciente parte del Centro Nacional de Huracanes, el fenómeno alcanzó la categoría 3, lo que significa que se trata de un huracán de fuerza mayor.
Los meteorólogos pronostican que el centro de Delta se moverá sobre el Golfo de México esta noche, avanzando hacia el noroeste el viernes.
Se espera que entre a tierra hacia el final de la tarde o la noche del viernes. La ruta proyectada incluye el área suroeste de Louisiana donde el huracán de categoría 4 Laura tocó tierra hace menos de dos meses. También hay advertencias en vigor para zonas costeras de Texas y Mississippi.
El pronóstico más reciente indica que, sobre las 4:00 pm (hora del Este), Delta tenía vientos máximos sostenidos de 115 millas (185 kilómetros) por hora. Se encontraba a 345 millas (555 kilómetros) al sur de Cameron, Louisiana.
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El Centro Nacional de Huracanes había dicho que este jueves la velocidad de traslación se haría más lenta y que los vientos seguirían fortaleciéndose. De camino a la Península de Yucatán, Delta ya tuvo categoría de huracán mayor, aunque tocó tierra con categoría 2.
Los meteorólogos emitieron una advertencia de huracán desde el este de Sabine Pass, Texas, hasta Morgan City, Louisiana, incluidos Lake Charles y Lafayette en ese último estado.
También hay una advertencia de marejada ciclónica desde Sabine Pass, Texas, hasta Ocean Springs, Mississippi, incluido el lago Calcasieu, la Bahía Vermilion, el lago Pontchartrain, el lago Maurepas y el lago Borgne.
Una vez tierra adentro, se espera que se debilite a tormenta o depresión tropical, aunque sus remanentes podrían afectar a la zona con mal tiempo hasta por lo menos el domingo.
El décimo huracán de la temporada
Los residentes siguen preparándose para la llegada a las costas del estado del que es el décimo huracán de la temporada de 2020, la más intensa que se haya registrado en el Atlántico con un total de 25 tormentas con nombre.
"Esta temporada ha sido implacable", dijo el gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, quien volvió a recurrir a lo que se ha convertido en una de sus frases más mentadas de 2020: "Prepárense para lo peor. Y recen porque no sea tan malo".
Las ferreterías de Morgan City lucían este jueves abarrotadas de clientes que buscaban madera y herramientas para proteger sus hogares, que se encuentran en la trayectoria estimada de Delta.
"Los otros no me preocuparon, pero parece que somos el objetivo de este", dijo a The Associated Press el residente Terry Guarisco, mientras un empleado de la tienda lo ayudaba a cargar su camioneta con madera contrachapada que planeaba usar para tapiar su casa por primera vez en esta temporada de huracanes.
Los potentes vientos de hasta 120 millas por hora (190 kilómetros por hora) que trajo Delta al estado mexicano de Quintana Roo se cobraron la vida de al menos una persona, derribaron cientos de árboles y cortaron la energía eléctrica a miles de residentes de Cancún, Playa del Carmen y Puerto Morelos, entre otros centros turísticos de la región, informaron las autoridades el miércoles.
Este año, Louisiana fue golpeada por huracanes de fuerza considerable, aunque también se salvó del embate de algunos.
El área suroeste del estado, alrededor de Lake Charles, que según los pronósticos se encuentra en la trayectoria actual de Delta, aún se está recuperando del huracán Laura de categoría 4 que tocó tierra el 27 de agosto.
Casi seis semanas después, unas 5,600 personas todavía permanecen alojadas en hoteles de Nueva Orleans, porque sus hogares siguen demasiado dañados. En los costados de las carreteras que pasan por Lake Charles todavía se ven árboles caídos, techos arrancados y otros escombros que no se han podido recoger.
La ciudad de Nueva Orleans estuvo en jaque durante dís, preparándose para la llegada del huracán Sally a mediados de septiembre, que se desvió hacia el este y terminó tocando tierra en Alabama.
El huracán Marco también tenía previsto tocar tierra en Louisiana justo antes de Laura, en lo que hubiera sido un histórico doble golpe consecutivo de no haber sido porque el sistema se disipó sobre el río Mississippi.