El alcalde de Uvalde rechazó el viernes un nuevo reporte según el cual las autoridades desaprovecharon la oportunidad de acabar con rapidez el tiroteo en una escuela de esta ciudad Texas, en una nueva muestra de falta de consenso sobre la respuesta de las autoridades a una de las masacres más mortíferas de la historia de Estados Unidos.
El alcalde Don McLaughlin negó que ningún policía de Uvalde tuviera en la mira al atacante fuera del centro educativo y que pudiera dispararle.
"En última instancia, podía ser un entrenador con niños en el patio, no el tirador", explicó en un comunicado sobre la actuación policial.
Sin embargo, una investigación de la Universidad de Texas sobre la respuesta táctica apunta a que uno de los oficiales que respondieron al ataque tuvo a tiro al asaltante antes de que entrara a la escuela primaria Robb y matara a tiros a 19 niños y dos maestras el 24 de mayo.
Según el documento, de 26 páginas y encargado por el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DHS, por sus siglas en inglés), un agente armado con un rifle observó cómo el atacante se dirigía al campus, pero no disparó a la espera de recibir el visto bueno de un supervisor. Dicho supervisor "no escuchó o respondió demasiado tarde", según el informe.
Las diferentes versiones y la crítica pública del informe reafirman cómo, más de seis semanas después del tiroteo ocurrido el 24 de mayo, siguen existiendo dudas sobre cómo y por qué la policía, armada con rifles y escudos antibalas, esperó más de una hora antes de enfrentarse al atacante en un aula de cuarto grado.
También ha ampliado la brecha de confianza entre las autoridades de Uvalde y el estado, en particular el DHS, que contaba con tropas en el lugar de los hechos y ha responsabilizado en gran parte de la tragedia al jefe de policía del distrito escolar local, Pete Arredondo, suspendido temporalmente de su cargo.
El coronel Steve McCraw, que dirige el DPS, ha culpado en gran medida de la inacción de las fuerzas del orden al jefe de policía del distrito escolar de Uvalde, Pete Arredondo, a quien situó al mando del operativo.
Arredondo, en cambio, declaró al diario Texas Tribune que no creía estar a cargo. En junio fue suspendido temporalmente y a principios de julio renunció a su cargo electo en el ayuntamiento de Uvalde.
El DPS informó el viernes a los legisladores estatales que la fiscal del condado de Uvalde, Christina Busbee, no autorizaba a la agencia a publicar un video de 77 minutos grabado en el pasillo donde estaba el salón en el que se atrincheró el asaltante, antes de que fuera tomado por las autoridades.
No es la primera vez que McLaughlin arremete contra la agencia. Anteriormente también la acusó de dar públicamente una versión incompleta y parcial de los hechos, al tiempo que dijo que los funcionarios locales habían recibido instrucciones de no divulgar información mientras la investigación estaba en curso.
Los legisladores de Texas están ultimando su propio informe tras entrevistar a puerta cerrada a más de 20 testigos y equipos de emergencia que actuaron en la tragedia. Se desconoce el día de su publicación.