IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Algo menos sensibles, pero muy útiles: todo lo que tiene que saber sobre las pruebas de antígenos caseras

"Parece haber una menor cantidad de virus al inicio [de la infección], lo que podría explicar por qué las pruebas de antígeno no dan positivo hasta el tercer día", explica un experto.

Las pruebas de antígenos caseras para detectar el COVID-19 han demostrado ser un arma poderosa en la batalla del país contra el coronavirus. Pero la rápida propagación de la variante ómicron ha provocado que los ciudadanos tengan que preocuparse por encontrar un test y fiarse del resultado.

Los expertos en salud afirman que los autotests siguen siendo una herramienta muy útil mientras el país observa cómo día a día aumentan vertiginosamente las infecciones: aunque pueden ser menos sensibles a la hora de identificar esta nueva cepa, ayudan a tomar decisiones en caso de síntomas y decidir qué medidas tomar en caso de dar positivo.

Pruebas de antígenos listas para ser usadas.
Pruebas de antígenos listas para ser usadas.Jean-Francois Badias / AP

Las pruebas más precisas son las PCR porque detectan pequeños fragmentos del material genético del virus. Dado que requieren de un equipo de laboratorio especializado para procesarlas, se puede llegar a esperar días para conocer el resultado, sobre todo en picos de demanda como el que atraviesa actualmente el país.

Las pruebas rápidas, en cambio, detectan moléculas que se encuentran en la superficie del virus, llamadas antígenos. No son tan precisas, pero pueden realizarse en casa y proporcionar resultados en tan sólo 15 minutos.

[OMS advierte de un tsunami de contagios de COVID-19 a dos años de su aparición]

Los estudios sugieren que las pruebas son más precisas cuando la persona tiene síntomas. Aunque son capaces de detectar casos asintomáticos, hay una mayor probabilidad de falsos negativos. La mayoría de los expertos coinciden en que las personas obtienen resultados positivos de los antígenos cuando atraviesan el periodo de más contagio.

Si una persona se imagina una curva de campana de la infección, una prueba PCR es buena para detectar el virus hasta el final. Una prueba rápida de antígenos es mejor para detectarlo en el centro de la curva, cuando una persona es más infecciosa y representa el mayor riesgo para los demás.

"Se necesita más [cantidad de] virus para que la prueba de antígeno sea positiva que para que la PCR sea positiva", explicó el doctor Omai Garner, director de microbiología clínica de UCLA Health, donde dirige un laboratorio de pruebas.

Sin embargo, eso no significa que una prueba de antígeno negativa sea la excusa para hacer lo que se quiera, especialmente porque la variante omicrón parece haber afectado posiblemente a la forma en que funciona la curva de campana para detectar el virus.

[Las autoridades de salud explican la reducción del tiempo de aislamiento por COVID-19 ante la crítica de algunos expertos y personal médico]

Es preciso ser prudente y adoptar medidas para evitar la expansión del COVID-19, principalmente si se tiene algún tipo de síntoma o se ha estado en contacto con un positivo y la prueba da negativo.

A modo de ejemplo, Garner reveló que toda su familia, que ha sido vacunada, dio positivo el miércoles después de días de resultados negativos a pesar de que tener pocos síntomas.

Tras el anuncio del martes de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de que algunas pruebas de antígenos pueden no ser tan sensibles a la variante omicrón, el experto dijo que la gente debe ser consciente de que, si se tiene secreciones nasales o tos y las pruebas de antígenos son negativas, hay que considerar repetir el test al cabo de uno o dos días.

"Estas pruebas no parecen funcionar muy bien en las primeras etapas de estas infecciones porque no parece que ómicron tenga una carga viral tan alta en los primeros dos días, a diferencia de delta, que tenía una carga viral altísima en el primero", subrayó.

"Lo que está cambiando ahora es el momento en que se realiza la prueba. Ahora parece haber una menor cantidad de virus al inicio [de la infección], lo que podría explicar por qué las pruebas de antígeno no dan positivo hasta el tercer día", argumentó.

Sin embargo, antes incluso de poder someterse a una prueba casera, muchas personas luchan por poder comprarla. La demanda se ha disparado al mismo tiempo que han explotado los contagios, agotando las subsistencias en tiendas y farmacias y obligando a los vendedores a limitar unidades por persona.

En paralelo, las solicitudes para realizarse una PCR también han crecido exponencialmente, generando un embudo en los laboratorios y retrasando la entrega de resultados.

"La demanda ha superado por completo a la oferta", afirmó Gigi Gronvall, investigadora principal del Centro de Seguridad Sanitaria Johns Hopkins. "Ciertamente, se han hecho muchas cosas correctas para aumentar el acceso, pero a principios de este año no había demanda y esas pruebas se quedaron en los estantes y [los fabricantes] redujeron la producción", apuntó. 

El Gobierno del presidente, Joe Biden, anunció una inversión de unos 3,000 millones de dólares para aumentar la producción de pruebas de antígenos. Muchos expertos señalan que la decisión llega tarde, en plena ola de contagios.

La Administración también prometió repartir 500 millones de autotests a partir de enero, como parte de su estrategia para frenar la propagación del coronavirus.

Los precios de las pruebas de antígenos seguirán fluctuando, pero muchos expertos reclaman que deberían bajar a medida que haya más oferta.

Con información de NBC News