IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Llegan a Guatemala los restos de la menor que murió bajo custodia de la Patrulla Fronteriza

Originaria de la comunidad de San Antonio Secortez, del municipio de Raxruhá, la menor había viajado con su padre en busca del sueño estadounidense.

Los restos de Jakelin Caal, la niña migrante que murió el pasado 8 de diciembre bajo custodia de la Patrulla Fronteriza, llegaron este domingo a Guatemala para su velatorio y posterior inhumación en una remota comunidad del norte del país.

Ningún representante de la familia de la menor llegó al Aeropuerto Internacional La Aurora, en la capital, según la Cancillería.

En las instalaciones aéreas existe una capilla en la que se instalará el ataúd para luego entregarlo a una funeraria privada que lo trasladará, luego de los trámites legales, hasta el departamento norteño de Alta Verapaz para su velatorio y posterior entierro.

Originaria de la comunidad de San Antonio Secortez, del municipio de Raxruhá, la menor había viajado con su padre, Nery Caal, de 29 años, en busca del denominado sueño estadounidense.

La madre de la niña, Claudia Maquín, de 27 años, tiene otros tres hijos menores con Nery y prefiere que su esposo siga en Estados Unidos para que ayude a mantener a los niños.

Los restos de la menor fueron trasladados a Guatemala desde Laredo (Texas), una vez que las autoridades consulares en Del Río cumplieron con los trámites legales. 

Jakelin Caal Maquín estaba bajo protección de la Patrulla Fronteriza cuando murió, por lo que el Estado de Guatemala ha pedido al gobierno de Estados Unidos una exhaustiva investigación de este caso.

La niña y su padre viajaban con un grupo de 163 personas, que fue detenido el pasado 6 de diciembre cerca del puerto de entrada de Antelope Wells, en el estado de Nuevo México, en medio del desierto. Les llevaron en autobuses a la estación más próxima de la Patrulla Fronteriza, la de Lordsburg, a unos 90 minutos. El padre dice haber firmado un formulario donde indicaba que estaba en buen estado de salud. Sin embargo, oficiales de inmigración indican que el padre les dijo que la niña estaba enferma y que vomitaba mientras eran trasladados en autobús. Cuando llegó a su destino, ya no respiraba.  

CBP indicó en un comunicado que Jakelín no había comido ni tomado agua durante varios días cuando cruzó la frontera, algo que disputan los abogados de la familia, y que fueron ellos quienes le ofrecieron de comer y beber.

Los abogados de la familia han pedido una investigación. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la oficina del inspector general del Departamento de Seguridad Nacional se habían comprometido anteriormente en un comunicado a investigar el caso.