"es mejor que tengan otra familia a que terminen en la prostitución, las drogas o se mueran de hambre".
este es el testimonio de una madre de 43 años que, desesperada ante la situación de precariedad que vive la familia y todo el país, decidió entregarle a su hija de cinco años a una familia con mejores opciones.
madre de siete hijos, desempleada ella y su esposo, y con la única ayuda del equivalente a seis dólares mensuales que recibe como pensión su anciano padre, a zulay pulgar no le quedó otra opción, según contó en un amplio reportaje de la agencia reuters.
lo preocupante es que esa decisión se ha estado convirtiendo en tendencia en los últimos años a lo largo y ancho del que fuera en otros tiempos el país más rico de américa latina.
venezolanos pesan el dinero en vez de contarlo
en una nación con un salario promedio de unos 50 dólares mensuales según la tasa no oficial, tres consejos locales de protección infantil y cuatro grupos de bienestar social han confirmado el preocupante aumento de los casos de padres que entregan a sus hijos al estado, a organizaciones benéficas, a amigos o a familiares.
el gobierno calla, no ha hecho públicos los datos reales sobre la cantidad de progenitores que se ven obligados a pasar por este doloroso trámite, si bien las organizaciones asistenciales se empeñan en tener una idea exacta de la real envergadura de este nuevo fenómeno en el país.
muy cerca de donde vive zulay reside nancy garcía, la vecina de 54 años que acogió a la pequeña. garcía labora en un supermercado y cuida de cinco hijos. sin embargo, asegura, no podía soportar ver a aquella niña pasando hambre.
"mi esposo, mis hijos y yo nos apoyamos para ir enseñándole", dijo. "ya me llama mamita y a mi esposo papito".
el consejo de protección para niños y adolescentes, un centro de servicio social en el municipio carirubana, en el estado falcón, en el noroeste del país, desde donde se observa el caso de pulgar, ha recibido ya no pocos casos de padres que piden ayuda de algún tipo para poder sostener a sus hijos. en 2015, al menos un padre al día llegaba para pedir algo de ayuda.
venezuela saca de circulación el billete de mayor denominación
"el motivo principal es la falta de alimentos", asegura maría salas, directora de esta institución.
salas relata que, desbordados por la demanda de ayuda y provistos con pocos recursos, pidieron la colaboración de las autoridades locales para instalar al menos un comedor, pero no tuvo suerte.
en medio de la escasez y el abandono más agudos que hayan podido experimentar, a los venezolanos les falta todo: desde la comida hasta las medicinas. a esto habría que sumar la inflación, la recesión económica, la devaluación del bolívar y una inseguridad social como nunca antes se había vivido.
mientras el gobierno culpa a estados unidos y a la oposición, todo aquel que profundice tiene que reconocer que el origen del mal está en las políticas implementadas en su momento por el difunto presidente hugo chávez y continuadas por su mejor acólito, nicolás maduro.
"los padres vienen llorando", ha declarado por su parte angeyeimar gil, directora del consejo de protección del municipio sucre, en la propia capital del país.
"es una situación muy dramática porque es escuchar la tristeza de los papás al decir que no los pueden mantener", sostuvo. "estamos atendiendo bastante situaciones de desnutrición, de niños que llegan al hospital con casos de escabiosis severa".
para la mayoría de los padres que sí conviven y atienden a sus hijos, la llegada de la navidad resulta doblemente dolorosa.
“este año no hay navidad –asegura carmen calma en un reporte reciente de the new york times-. no hay nada. no hay harina de maíz para hacer la hallaca”.
la mujer de 47 años que vive de elaborar ese tamal típico de venezuela dice que apenas ha podido recibir pedidos: “si consigo la harina, cuesta 4000 bolívares y el costo de la hallaca sube por las nubes”.
“el diciembre pasado se podía conseguir, este es imposible. está muy costoso todo, unos zapatos cuestan una fortuna”, explicó odainés pedroza, de 27 años, también desde caracas.
según estimados, la canasta alimentaria básica de octubre se situó en 429.626 bolívares —más de 600 dólares de acuerdo a la tasa oficial y unos 173 dólares según el precio del dólar en el mercado negro, a valores del 15 de diciembre—.
se trataría del equivalente a 19,5 salarios mínimos, de acuerdo con el centro de documentación y análisis social de la federación venezolana de maestros (cendas-fvm).
“antes había adornos, luces. ahora no, la gente va pendiente de la comida”, contó zaira ruiz, de 32 años.