En diciembre pasado, durante una entrevista para 'People', Michelle y Barack Obama recordaron cómo fue dejar a su hija Sasha en la univesidad, y ahora, la ex primera dama de Estados Unidos relató cómo fue el momento en el que Malia comenzó esa misma etapa como estudiante.
Las hermanas Malia y Sasha llegaron a vivir en la Casa Blanca cuando tenían 11 y 8 años, respectivamente, y en el documental de Michelle Obama, titulado 'Becoming', las chicas hablaron por primera vez del trabajo de su mamá. Esas pequeñas niñas se convirtieron en mujeres, de 22 y 19 años, que han dejado el nido.
Recientemente, la madre de las jóvenes recordó el emotivo momento que vivieron ella y su esposo cuando dejaron a Malia en la Universidad de Harvard por primera vez, en 2017, experiencia que terminó con lágrimas de por medio.
Fue durante una charla con su madre, Marian, y su hermano, Craig Robinson, para su podcast, que Michelle explicó que ella y Barack se contuvieron hasta que se despidieron de su hija.
"Llevamos a Malia a almorzar, y con todo lo que teníamos encima por llevarla al colegio, quedarnos más tiempo no iba a ser útil, así que estábamos entrando y saliendo", contó Obama en la plática.
"De hecho, la dejaron mudarse un día antes para que nuestra conmoción no se diera en medio de la mudanza de todos los demás", agregó Michelle. "Pero cuando ella se fue del restaurante y nos subimos al auto, escuché a Barack [ruido de sollozos], y Alan, su agente, le pasó un pañuelo y él le dijo, 'Gracias, hombre".
"Ambos soltamos algunas lágrimas porque había algo en dejarla. A pesar de que había estado en un campamento en el que dormía lejos y había viajado, era como si la bebé se hubiera ido ahora", contó la mamá de dos en su podcast.
Luego, entre risas, Michelle añadió lo siguiente:"¡No sabíamos que regresarían tan pronto dada la pandemia!".
Fue en mayo pasado cuando, debido a la contingencia sanitaria causada por el coronavirus, Michelle, de 56 años, le contó a Ellen DeGeneres en una entrevista telefónica que se encontraba en Washington, DC, junto con Barack Obama, de 58 años, y sus hijas, tratando de mantener una rutina y estructurar sus días.
La hija menor de la pareja, Sasha, ahora también está estudiando en la Universidad de Michigan, y Michelle admitió que, si bien fue un poco más fácil, cuando se trató de despedirse, ella y Barack estaban igual de emocionados.
"Estábamos mejor con Sasha, pero aun así, justo al final, ese mismo momento cuando nos íbamos, y todos nos íbamos y ella se quedaba... hubo ese pequeño nudo en la garganta, como si esto fuera un verdadero hito en sus vidas", comentó.
Antes de este relato de Michelle, Barack Obama había hablado de lo que fue llevar a Malia a la universidad.
El orgulloso padre Barack habló previamente sobre Malia yendo a la universidad. Su confesión la hizo en un evento para la Fundación Beau Biden ese mismo año. "Para aquellos de nosotros que tenemos hijas, simplemente sucede rápido", expresó.
"Dejé a Malia en la universidad y les estaba diciendo a Joe y a Jill [Biden] que era un poco como una cirugía a corazón abierto".
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