Veintinueve años después de que le dijeran a una joven madre que había perdido a su bebita recién nacida, la mujer se encontró en San José, California, con la criatura que daba por muerta, en vísperas del Día de Acción de Gracias.
La hija es hoy un hombre transgénero, padre de una bebé de ocho meses.
El reencuentro de Tina Bejarano Gardere con Kristin Cooke se produjo a principios de esta semana en el Aeropuerto Internacional de San José. Kristin le presentó a su nueva nuera y a su nieta, Scarlet.
"Estaba abrazándola y besándola y abrazándolo a él, no podía dejar de abrazarlo", contó Bejarano Gardere al diario Los Angeles Times.
Bejarano dio a luz a Kristin a los 17 años. Ya tenía una hija de 1 año, y ante la presión familiar puso a la recién nacida en adopción. Poco después de firmar los documentos, le dijeron que su bebé había muerto.
Durante 29 años, cada 6 de abril, celebraba el cumpleaños de su hija fallecida.
La enrevesada historia que culminó en el emotivo encuentro comenzó cuando Cooke sometió una prueba de su ADN al sitio de genealogía Ancestry.com. en buscas de pistas sobre su herencia genética, que pudiera compartir con su hija cuando esta crezca. Pronto recibió una alerta en su teléfono: su ADN coincidía con el de otra persona.
Cooke contactó a Bejarano. "Creo que necesitamos hablar", le escribió. “[Ancestry.com] dice que estamos relacionados y dice que eres mi mamá".
Bejarano no salía de su incredulidad. Junto con su esposo, Eric Gardere, a quien conoció poco después de dar a luz, le preguntaron a Cooke detalles como fecha y lugar de nacimiento. Todo coincidía, menos el género. Bejarano había dado a luz a una niña, Cooke era hombre. ¿Cómo era esto posible? Cuando finalmente se decidió a preguntarle, Cooke confirmó que había nacido hembra y ahora era un hombre transgénero. Bejarano no salía de su alegría.
Cooke fue criado por sus padres adoptivos en Nueva Jersey, quienes lo apoyaron en todo momento, incluso cuando decidió convertirse en un hombre transgénero. Asegura que no tuvo interés en buscar a su madre biológica hasta que se convirtió en padre.
Después de encontrar a Bejarano Gardere e intercambiar mensajes y fotos con ella, aceptó visitarla en su casa en Los Baños, California.
En una gran cena familiar, Cooke se enteró de que sus hermanos biológicos, como él, amaban el regaliz negro. Bejarano Gardere, que estudia arte y fotografía, supo que su hijo es creativo, le gusta hacer juguetes para su hija y documenta sus experiencias como padre transgénero en un blog en internet.
"Honestamente, no esperaba sentirme tan a gusto”, dijo Cooke.
La familia realizó un breve viaje por carretera a Old Town Sacramento, donde almorzaron en un restaurante mexicano y caminaron y visitaron a la hija mayor de Bejarano Gardere en Antioch, California. Regresaron a su casa en Los Banos y jugaron Monopolio hasta altas horas de la noche. Y este miércoles recorrieron el área de la Bahía de San Francisco.
"Creo que es increíble. Es una locura. Es surrealista ", dijo Cooke. “Era como estar rodeado de familia, todos conectados. Tengo una familia completamente nueva.
En el Día de Acción de Gracias, madre e hijo se despidieron.
"Estoy feliz", confesó Bejarano Gardere. "Honestamente puedo decir que estoy tan feliz de que el peso se haya levantado".