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¿Es seguro llamar al 988, la nueva línea de prevención del suicidio? Esto debe saber antes de marcar

Verificamos las preocupaciones publicadas en redes sociales sobre el funcionamiento de este servicio, incluida la respuesta de la policía y el posible traslado a un hospital.

Por Aneri Pattani - Politifact

Cuando se activó el número de teléfono 988 como la Línea Nacional de Prevención del Suicidio, numerosas organizaciones, expertos, activistas y proveedores de servicios de salud mental lo celebraron.

La línea lleva años en funcionamiento, pero redirigirla a un número de tres dígitos puede facilitar su acceso y equipararla con el teléfono 911 de emergencias. A un mes de su lanzamiento, sin embargo, publicaciones en redes sociales advierten sobre posibles riesgos.

Una publicación viral en Instagram dice: “El 988 no es amigable. No llamen, no lo compartan, no lo recomienden sin saber los riesgos”. Detalla entre estos que la policía puede acudir a la vivienda de quien llama, y esa persona puede tener que recibir tratamiento en salas de emergencia u hospitales psiquiátricos, recalcando así el costo emocional y financiero de la experiencia.

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Otras publicaciones en Instagram y Twitter plantean preocupaciones similares, sugiriendo que la línea envía a la policía a chequear a las personas sin su consentimiento y estas podrían ser forzadas a recibir tratamiento.

¿Es el 988 un recurso de salud mental eficaz o un motivo de preocupación? Investigamos para responder estas preguntas y averiguar si la línea funciona y qué debería saber antes de marcarla.

¿Por qué algunos no recomiendan llamar al 988?

Contactamos a algunos de los usuarios preocupados en redes sociales, entre ellos Liz Winston, autora de la publicación en Instagram que decía que la línea “no es amigable”.

Winston dice que quería que la gente entendiera el riesgo potencial del “sistema traumatizante” que ella asegura que sufrió.

Hace un año Winston tuvo pensamientos suicidas y acudió a un hospital en Nueva York donde esperaba hablar con un psiquiatra. Pero fue ingresada contra su voluntad en el ala psiquiátrica de la sala de emergencias. En las 24 horas que permaneció internada no recibió ayuda y la experiencia fue “extremadamente traumática”.

Winston no marcó a la línea de emergencia, pero dijo que quienes sí lo hacen podrían terminar en una situación similar porque la policía traslade a las personas que llaman a una sala de emergencias o a un hospital psiquiátrico.

“Entiendo que hay una urgencia de rescatar a las personas en crisis, pero la realidad es que los servicios empeoran el problema”, afirmó Winston, quien trabaja como compañera en salud mental y creó un grupo en línea para personas que se recuperan de un tratamiento involuntario.

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Investigadores han demostrado que las tasas de suicidio aumentan drásticamente meses después del alta en un hospital psiquiátrico. Quienes fueron internados en contra de su voluntad son más propensos a quitarse la vida que quienes decidieron ir.

Estos confinamientos involuntarios ocasionan que personas jóvenes oculten sus intenciones suicidas en el futuro, mientras otras batallan por pagar las altas facturas por servicios médicos que no querían.

Emily Krebs, investigadora sobre el suicidio que se unirá en el otoño como profesora en la Universidad de Fordham, afirmó que el tratamiento involuntario en Estados Unidos es visto como una parte necesaria en la prevención, pero que otros países no lo ven así.

La Organización de las Naciones Unidas lo ha tildado como un abuso a los derechos humanos y ha pedido se prohiba.

Krebs también quiere que las personas estén informadas antes de marcar al 988, por eso escribió en Twitter que la línea puede y enviará “a la policía si lo considera necesario”.

Eso puede resultar peligroso, insistió, pues uno de cada 5 tiroteos policiales mortales en 2019 involucraron a una persona con alguna enfermedad mental. En otros años la cifra ha sido incluso más alta.

¿Qué dice la línea sobre cómo maneja las crisis?

Oficiales de la línea reconocen los riesgos de involucrar a las autoridades en situaciones de crisis de salud mental. Es por ello que el número 988 se creó como alternativa al 911, aseguró John Draper, director de la línea y vicepresidente de Vibrant Emotional Health, la compañía que la administra.

“Sabemos que la mejor forma de mantener a una persona a salvo es empoderarla y que elija estarlo”, indicó Draper. Enviar a la policía es el último recurso, insistió.

Los consejeros que contestan llamadas o responden a mensajes de texto o en línea están formados para escuchar activamente, discutir las preocupaciones y deseos de las personas en riesgo y colaborar con ellas para encontrar soluciones. 

La mayoría de las llamadas sobre suicidio se resuelven sin necesidad de recurrir a las autoridades, aseguró Draper. 

Los consejeros hablan con las personas sobre sus motivos para morir y las razones para vivir; tratan de motivarlos a que contacten a familiares, amigos, líderes religiosos u otras personas de su comunidad que les apoyen; les remiten a buscar un tratamiento ambulatorio; o establecen llamadas de seguimiento con el 988.

La Línea Nacional de Prevención del Suicidio brinda apoyo emocional gratuito y confidencial las 24 horas del día.
Sergey Mironov / Getty Images

Solo cuando alguien no puede o no quiere colaborar en un plan de seguridad y el consejero considera que la persona se hará daño, se debe llamar a los servicios de emergencia, según la política de la línea de ayuda.

En ese momento, afirmó Draper, “tenemos la opción de dejar que (el daño) ocurra o hacer lo que podamos para mantenerlos a salvo”.

Antes de que se pusiera en marcha el número 988, se enviaban servicios de emergencia en el 2% de las interacciones de la línea de atención, informó el servicio.

Con unos 2.4 millones de llamadas al año, eso significa que los servicios de emergencia se pusieron en marcha en unas 48,000 llamadas. Estos pueden ser equipos móviles de crisis, integrados por personas formadas en salud mental, pero en muchas comunidades rurales y suburbanas suele ser la policía.

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El 988 no puede geolocalizar a las personas que llaman, indicó Draper, desmintiendo la información que circula en redes sociales. 

Cuando alguien contacta a los servicios de emergencia, el 988 comparte con operadores del 911 la información que tiene sobre la ubicación de la persona que llamó (usualmente su número de teléfono, el código de área, o la dirección IP de un usuario del chat) para ayudarles a encontrarla.

A partir de este otoño, la línea actualizará sus políticas para exigir a los supervisores que revisen todas las comunicaciones que necesiten los servicios de emergencia. Los asesores del 988 también recibirán capacitación adicional sobre alternativas que no incluyan a la policía y las consecuencias que pueden sufrir las personas cuando las autoridades responden a su llamada.

¿Debería usar el 988? Depende

La línea 988 es el servicio de crisis de salud mental más completo del país y puede proporcionar asistencia crucial a personas con problemas emocionales. Si ha considerado el suicidio sin actuar, es poco probable que el 988 contacte a la policía sin consentimiento.

Los consejeros procurarán escucharle y proporcionarle recursos. Sin embargo, si está en riesgo inminente y podría suicidarse, puede llamar a la policía, y es posible le trasladen a un hospital involuntariamente.

Tenemos la opción de dejar que (el daño) ocurra o hacer lo que podamos para mantenerlos a salvo”

John Draper  DIRECTOR de la línea 988

Sonyia Richardson, trabajadora social clínica y propietaria de una agencia de asesoramiento que atiende a clientes mayoritariamente negros y latinos en Charlotte, Carolina del Norte, reconoció que no informó inmediatamente a sus clientes sobre 988 cuando se lanzó. 

Aunque es parte del comité de planificación del 988 en su estado, admitió que necesitaba tiempo para confiar en el servicio. Cuando se enteró en una reciente reunión del comité, de que menos del 5% de las llamadas a la línea daban lugar a una respuesta de las fuerzas de seguridad en Carolina del Norte, se sintió más tranquila.

“Quizá haya problemas con el 988, pero puede ser una de las opciones más seguras para nosotros”, aseguró. Con altas tasas de suicidio incrementando entre jóvenes negros la comunidad necesita más alternativas para salvar vidas, agregó.

¿Hay otras opciones?

Aunque Estados Unidos no cuenta con una línea telefónica nacional de salud mental que se comprometa a no contactar a la policía sin el consentimiento de los usuarios, hay varias alternativas más pequeñas que buscan evitar la participación de las autoridades.

Las líneas calientes son una opción. Suelen ser atendidas por compañeros, es decir, personas que también han experimentado problemas de salud mental. Se centran menos en la intervención en crisis y más en el apoyo emocional para prevenirlas. Puede encontrar un directorio de líneas de ayuda por estado aquí.

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Abajo hay otros recursos disponibles. Esta no es una lista definitiva y algunos servicios dependen del lugar en el que se encuentre.

BlackLine es una línea enfocada en personas negras, latinas, nativoamericanas, musulmanas o del colectivo LGBTQ.

Kiva Centers ofrece grupos diarios de apoyo en línea.

M.H. First Oakland y M.H. First Sacramento operan los fines de semana en las ciudades de Oakland y Sacramento en California.

Peer Support Space organiza grupos virtuales de apoyo dos veces al día, de lunes a sábado.

Project LETS ofrece apoyo por mensajes de texto para cuestiones urgentes que implican una hospitalización involuntaria.

Samaritans of New York es una línea con base en la ciudad de Nueva York.

Trans Lifeline sirve a personas trans.

Wildflower Alliance tiene una línea de apoyo y grupos enfocados en la prevención del suicidio.