Por Tom Costello y Phil Helsel - The Economist
Tras un verano con miles de vuelos retrasados y cancelados, el Departamento de Transporte presiona a las aerolíneas para que mejoren su atención a los viajeros, indicando que preparará un plan para cambiar los reglamentos aéreos en caso de que no lo hagan.
Además, el Gobierno federal prevé publicar en septiembre una página web para que los viajeros puedan consultar fácilmente las políticas en caso de cancelación y retrasos de todas las aerolíneas.
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El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, calificó las disrupciones en los vuelos como inaceptables: “El mensaje a las aerolíneas es que deben facilitar la comprensión de los derechos de los pasajeros”, afirmó en una entrevista este viernes con la cadena NBC News.
En los primeros seis meses del año, el 24 % de los vuelos en EE.UU. se han retrasado y el 3 % se ha cancelado, según el Departamento de Transporte, que asegura que desde 2020 recibe “una avalancha de quejas sobre los servicios de viajes aéreos”.
Las aerolíneas culpan a la escasez de pilotos. American Airlines dijo en julio que podría tomarle tres años volver a su capacidad plena.
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El Departamento de Transporte anunció a principios de agosto una nueva regla para requerir a las aerolíneas que reembolsen dinero a los viajeros cuando haya retrasos de tres horas en vuelos nacionales y seis en internacionales, y si cambian el aeropuerto de destino.
La industria de las aerolíneas dijo en un comunicado que cumplen las reglas federales sobre reembolsos en efectivo y que "se esfuerzan por brindar el más alto nivel de servicio y se comprometen a trabajar con los viajeros para abordar sus problemas individuales”.
Los expertos sugieren contar siempre con un plan alternativo antes de salir, y elegir vuelos diurnos por si hay contratiempos.