Por Emma Barnett y Jillian Frankel - NBC News
El expresidente Donald Trump prometió este sábado que habrá "un baño de sangre" si no es reelecto en noviembre.
Los comentarios ocurrieron mientras Trump discutía la posibilidad de una creciente guerra comercial con China por la fabricación de autos durante un mitin en Ohio. El evento tenía como objetivo conseguir votos para el candidato republicano al Senado Bernie Moreno, a quien Trump demostró su apoyo en diciembre, antes de las primarias de Ohio del martes.
"Si me está escuchando, presidente Xi — y usted y yo somos amigos— pero entiende mi forma de ser. Esas plantas monstruosas de fabricantes de autos que está construyendo en México ahora… no va contratar a estadounidenses y nos venderán los carros a nosotros, no. Vamos a poner un arancel del 100% en cada vehículo que venga de la frontera, y no podrán venderlos si yo resulto electo", dijo Trump.
"Ahora, si no resulto reelecto, será un baño de sangre para el país. Eso será lo de menos, pero no venderán esos autos. Están construyendo fábricas gigantescas".
Después añadió: "Si no se ganan estas elecciones no estoy seguro de que se volverán a tener elecciones en este país".
En respuesta a los comentarios del expresidente, la vocera de su campaña presidencial, Karoline Leavitt, dijo a la cadena NBC News que "las políticas de Biden crearán un baño de sangre económico para la industria de automóviles y sus trabajadores".
James Singer, un portavoz de la campaña del presidente, Joe Biden, emitió un comunicado tras las declaraciones de Trump remarcando que el exvicepresidente Mike Pence anunció que no apoyará la candidatura de Trump para la reelección.
"Así es Donald Trump: un perdedor que es derrotado por más de 7 millones de votos y, después, en lugar de apelar a un público masivo insiste en sus amenazas de violencia política", dijo Singer. "Él quiere otro 6 de enero, pero la gente de Estados Unidos le dará otra derrota electoral este noviembre porque sigue rechazando su extremismo, su afecto por la violencia, y su sed por venganza".
Antes de empezar a hablar, el expresidente se puso de pie y saludó junto al podio mientras sonaba en altavoces "Justicia para todos" interpretada por el "coro J6" de reclusos esperando juicio por su papel en el asalto al Capitolio y a quienes calificó como "rehenes".
"Han sido tratados terriblemente y de forma muy injusta, y todo el mundo lo sabe", aseguró Trump al principio de su discurso. "Y trabajaremos al respecto tan pronto como el primer día que estemos al mando. Salvaremos nuestro país, y vamos a trabajar con la gente para tratar a esos patriotas increíbles".
El expresidente además aseveró durante el evento que algunos inmigrantes indocumentados "no son personas", aunque agregó que "no tenía permitido decir eso porque la izquierda radical asegura que es terrible decirlo".
Además pidió a los católicos que no votaran por Biden.
"Cualquier católico que vote por ese insensato está loco porque están siendo perseguidos", afirmó Trump.
Biden es el segundo presidente católico romano en ser electo en Estados Unidos.