Por The Associated Press vía NBC News
Líderes de la Convención Bautista del Sur (CBS), el grupo protestante más grande de Estados Unidos, obstaculizaron y denigraron a sobrevivientes de abuso sexual por parte del clero durante casi dos décadas para proteger su reputación, según una contundente investigación de 288 páginas publicada el domingo.
Estos sobrevivientes, así como otros bautistas, llevaron de manera repetida acusaciones frente al Comité Ejecutivo de la CBS, “pero solo se encontraron, una y otra vez, con la resistencia, las obstrucciones e incluso la abierta hostilidad por parte de algunos dentro del Comité Ejecutivo”, dice el informe.
La investigación de siete meses fue realizada por la firma independiente Guidepost Solutions, que fue contratada por el Comité Ejecutivo después de que delegados a la reunión nacional del año pasado presionaron para que se realizara una investigación independiente.
“Nuestra investigación reveló que, durante muchos años, algunos altos líderes del Comité Ejecutivo, junto con un abogado externo, controlaron en gran medida la respuesta del Comité a estos informes de abuso... y se centraron singularmente en evitar la responsabilidad de la Convención Bautista del Sur”, dice el informe.
“En servicio de este objetivo, los sobrevivientes y otras personas que denunciaron abusos fueron ignorados, no les creyeron o se encontraron con el estribillo constante de que la CBS no podía tomar ninguna medida debido a su política con respecto a la autonomía de la iglesia, incluso si eso significaba que los abusadores condenados continuaron en el ministerio sin medidas discipinariaso o advertencias a su iglesia o congregación actual”, agregó el informe.
El presidente de la CBS, Ed Litton, dijo en un comunicado el domingo que está “apenado hasta la médula” por las víctimas y agradeció a Dios por su trabajo para impulsar a la CBS hasta este momento. Llamó a los bautistas del sur a lamentarse y prepararse para cambiar la cultura de la organización e implementar reformas.
“Oro para que los bautistas del sur comiencen a prepararse hoy para tomar medidas deliberadas que aborden estos fracasos y trazar un nuevo rumbo cuando nos reunamos en Anaheim”, dijo Litton.
Entre las recomendaciones clave del informe se incluyen:
- Crear una comisión independiente y luego establecer una entidad administrativa permanente para supervisar reformas integrales a largo plazo relacionadas con el abuso sexual y las conductas indebidas relacionadas dentro de la CBS.
- Crear y mantener un sistema de información de agresores para alertar a la comunidad sobre agresores conocidos.
- Proporcionar un paquete integral de herramientas con recursos que incluyan protocolos, capacitación, educación e información práctica.
- Restringir el uso de acuerdos de no divulgación y acuerdos civiles, que obligan a los sobrevivientes a la confidencialidad en casos de abuso sexual, a menos que lo solicite el sobreviviente.
El escándalo de abuso sexual pasó a ser centro de atención en 2019 tras un histórico informe de los periódicos Houston Chronicle y San Antonio Express-News que documentó cientos de casos en iglesias bautistas del sur, incluidos varios en los que los presuntos perpetradores permanecieron en el ministerio.
El año pasado, miles de delegados en la reunión nacional de la CBS enviaron el mensaje de que no querían que el Comité Ejecutivo supervisara una investigación sobre sus propias acciones. En cambio, votaron abrumadoramente para crear el grupo de trabajo encargado de supervisar la revisión de terceros. Litton, pastor de Redemption Church en Saraland, Alabama, nombró al panel.
Los miembros del Comité Ejecutivo tuvieron una semana para revisar el informe antes de que se hiciera público el domingo por la tarde. Las recomendaciones del grupo de trabajo basadas en los hallazgos de Guidepost se presentarán en la reunión anual de la CBS en Anaheim, California, el 14 y 15 de junio.
En febrero, el Comité Ejecutivo ofreció una disculpa pública y un acuerdo monetario confidencial a la sobreviviente de abuso sexual Jennifer Lyell, quien fue condenada por el servicio de noticias interno del grupo cuando decidió hacer pública su historia en marzo de 2019.
Lyell reveló públicamente que era una sobreviviente de abuso sexual después de enterarse de que el hombre al que acusó de abuso, un exprofesor del seminario bautista del sur, había regresado recientemente al ministerio. Ella dijo que presentó su historia para evitar que el hombre cometiera más actos abusivos.