Muchos aseguraron verlo: una misteriosa criatura, semejante a un simio, que habita las frías montañas del Tíbet o Nepal. Con el tiempo, el abominable hombre de las nieves se convirtió en una leyenda.
Ahora, sin embargo, la ciencia habría dado con evidencias suficientes para afirmar que se trataría, realmente, de un animal mucho más común y corriente. ¡Mira!
Un monstruo, ¿no tan monstruoso?
El famoso Yeti no sería más que una especie de oso asiático, asegura un estudio publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B.
Para llegar a estas conclusiones, los especialistas analizaron el ADN de nueve supuestos restos del abominable hombre de las nieves, que se encontraban en museos y colecciones privadas, detalla un comunicado de la Universidad de Buffalo, responsable de la investigación.
Particularmente, se estudiaron huesos, dientes, piel, pelo y heces, recolectados en el Himalaya y la meseta del Tíbet.
El descubrimiento
“Nuestros hallazgos sugieren fuertemente que los fundamentos biológicos de la leyenda del Yeti se pueden encontrar en los osos locales”, aseguró Charlotte Lindqvist, autora principal del estudio, según el comunicado mencionado.
Es que, de todas las muestras analizadas, una resultó ser de un perro y, todas las restantes, de osos asiáticos, especialmente de la especie parda tibetana.
La investigación permitió, además, que el equipo creara un nuevo árbol familiar de subespecies de osos asiáticos en riesgo, lo cual podría ser útil para proteger a estos animales, concluye la revista National Geographic. ¡Qué tal!
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