Si un familiar o amigo precisa dinero, desde ya, muchos harían lo posible para prestárselo. Sin embargo, habría que tener en cuenta algunas cuestiones antes de hacerlo, y seguir estas reglas, para mantener las buenas relaciones ¡y que ninguno salga perdiendo! Te contamos.
Prestar, algo bastante común
Hacerle un préstamo a los seres queridos no sería algo raro. Según un reporte de American Consumer Credit Counseling, un 82% de americanos le prestarían dinero a un miembro de la familia que lo necesite, y un 66% haría lo mismo por un amigo.
Pero a pesar de las buenas intenciones y deseos, un préstamo monetario podría generar problemas en las relaciones cercanas, sobre todo, si el dinero no se devuelve. Por eso, quizás debas plantearte lo siguiente antes de decidirte a brindar tu apoyo financiero:
#1. Pregúntate si realmente puedes prestar el dinero. Parece bastante obvio, pero quizás no convenga prestar un monto que habías destinado para tu fondo de emergencias o algún objetivo inmediato. Si son ahorros que realmente no ibas a usar por un tiempo, entonces, adelante, sugirió Ruthann Driscoll, director de planificación avanzada en Northwestern Mutual, a la revista Forbes.
#2. Consulta con tu pareja. Si estás casado o convives, no dejes al otro fuera de la decisión. Sobre todo, si tienen cuentas conjuntas, prestar dinero a algún otro miembro de la familia puede llegar a generar problemas o carencias en tu propio hogar. “Prestar dinero a un pariente no solo puede hacer más escasas tus reservas de efectivo, sino que, si no eres frontal con tu pareja acerca de ello, puede perjudicar tu matrimonio”, señaló Driscoll.
#3. Pon un plazo para que te devuelvan el dinero. Plantea términos para el préstamo, con los que ambos puedan estar de acuerdo, señaló Byron Ellis, un Planificador Financiero Certificado, al sitio Business Insider. Hablen sobre:
- La cantidad de dinero que prestarás
- Las tasas de interés
- Cuánto tardará el otro en devolvértelo.
De esta forma, el otro sabrá que necesitará reunir el dinero, y tú sabrás cuándo tendrás nuevamente ese monto en tu cuenta.
#4. Todo, pero todo, va ¡por escrito! Cuando de dinero se trata, hasta el más memorioso puede sufrir lagunas mentales. Además, puede que las prioridades de la persona a la que le prestas el dinero puedan ir cambiando, y devolverte el préstamo quede al final de la lista. Por eso, pongan por escrito todo lo anterior, aconsejó la especialista financiera Priyanka Prakash, al sitio mencionado. Y, desde ya, deben firmarlo ambos.
#5. ‘Cash only’. Si alguien te pide que abras una tarjeta de crédito a su nombre o que ambos firmen para un préstamo, quizás lo mejor sea que te reúses. Nunca te pongas en una posición en la que las acciones de otros afecten tu capacidad para pedir préstamos o asegurarte crédito en el futuro. En cambio, opta por el efectivo, que es más fácil de controlar y no afectará tu puntaje de crédito, se recomienda en el sitio Money Crashers.
#6. Averigua para qué usará el dinero. En lugar de preocuparte tanto por herir los sentimientos de tu familia o de tu amigo, debes consultar para qué usará el dinero, y así determinar si te parece que el préstamo vale la pena. Piensa que ni siquiera un banco prestaría dinero sin saber hacia dónde irán los fondos. Por ende, ¡tú tampoco deberías!
Sigue estas reglas, habla con los tuyos y, seguramente, todo saldrá bien. Ante la duda, puedes consultar con un profesional en el tema.
MIRA TAMBIÉN:
“Necesito dinero urgente”. Préstamos o líneas de crédito: tus opciones si quieres cash
5 buenos motivos para prestarle atención al puntaje en tu historial crediticio