Selena Gray, una madre primeriza sufre de dolores insoportables, y una posible parálisis, luego de que la aguja epidural que le colocaran durante el parto se alojara en su columna vertebral.
La joven de Pensacola, Florida, dio a luz a Serenity, una bebé que pesó 7.3 libras el pasado 25 de junio.
El parto marchaba sin complicaciones, sin embargo, poco después, los médicos del Sacred Heart Hospital notaron que la aguja utilizada para inyectar la solución en la columna de Selena estaba atascada en su espalda.
"Básicamente la epidural se enroscó en mi columna vertebral", comentó Gray a Wear TV.
"Hay un nudo en mi columna vertebral y han estado tratando de quitármelo. No he podido levantarme ni moverme ni hacer nada", agregó.
Ahora, las piernas de la mujer de 18 años, están adormecidas por lo que se esfuerza por sentarse. Sin embargo, está completamente convencida en que su energía debe enfocarse en Serenity.
La epidural es un medicamento para adormecer que se administra por medio de una inyección en la espalda para disminuir el dolor de las contracciones del parto, según Medline Plus.
Este bloqueo se aplica en una zona que se encuentra sobre la columna vertebral o en la parte baja de la espalda de la paciente.
Aproximadamente es utilizado por el 71 % de las mujeres durante la labor de parto, en comparación con el 60 % que lo usaba en 2009, de acuerdo con un estudio reciente.
Aunque las complicaciones de una epidural son muy poco frecuentes, afectan aproximadamente a una de cada 20,000 a 50,000 personas, y las investigaciones sugieren que con el tiempo se están volviendo menos comunes.
No obstante, los expertos continúan luchando por resolver este tipo de inconvenientes.
"Es un dolor insoportable. Simplemente me siguen diciendo 'en todos mis años, no he visto nada como esto'. Así que básicamente están tan sorprendidos como yo", dijo a Wear TV.
Pero su hija, Serenity, la está ayudando a salir adelante. "Ella es tan linda, tiene sus ojos grandes marrones y abiertos. Ella es la mejor, realmente puede hacerte feliz y yo solo quiero estar en casa con ella", comentó Gray.
Sin embargo, Gray emprendió un viaje de seis horas hacia Gainvesville, Florida, donde médicos del Health Shands Hospital finalmente lograron remover la aguja epidural, según WEAR ABC 3 News.
Aunque Gray consiguió regresar a casa para disfrutar su maternidad, el dolor parece no haber acabado, pues su madre Patricia, a través de su cuenta de Facebook, dijo que su hija continuaba con un dolor muy fuerte.
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