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Alerta: los hisopos de algodón enviarían a 34 niños al hospital, ¡cada día!

Un estudio descubrió que, en EEUU, habría 12,500 casos anuales de lesiones del oído en niños, causadas por hisopos de algodón.

Si la rutina de limpieza cotidiana de tus hijos incluye limpiar sus oídos usando hisopos de algodón –también conocidos como cotonetes–, ¡cuidado! Esto podría ser una práctica riesgosa.

Un riesgo inadvertido

Un estudio realizado por investigadores del Nationwide Children’s Hospital descubrió que en EEUU, entre 1990 y 2010, aproximadamente 263 mil niños menores de 18 años visitaron la sala de emergencia por lesiones en el oído relacionadas con hisopos de algodón. Esto quiere decir, 12,500 casos anuales ¡o 34 diarios!, señala el sitio web del hospital mencionado.

El estudio, publicado en The Journal of Pediatrics, encontró lo siguiente:

• Los problemas más comunes fueron: sensación de un cuerpo extraño (30%), tímpanos perforados (25%) y lesión del tejido blando (23%).

• Entre los niños de 8 a 17 años, la sensación de un cuerpo extraño fue la lesión más común, mientras que para los menores de 8 años, lo fue el tímpano perforado.

• El 73% de las lesiones ocurrieron como resultado directo del uso de hisopos de algodón.

• En el 77% de los casos, los niños estaban manipulando por sí solos los hisopos. En el 16%, los papás hacían la limpieza y, en el 6%, los hermanos.

Entonces, ¿deberíamos usarlos?

Kris Jatana, investigador del Departamento de Otorrinolaringología Pediátrica del Nationwide Children’s Hospital, indica en el sitio web del hospital: “Los canales de las orejas suelen limpiarse por sí solos. El uso de hisopos de algodón para higienizar el conducto auditivo no solo empuja la cera más cerca del tímpano, sino que existe un riesgo significativo de causar lesiones en el oído”.

El sitio Audiology Associates of Westchester, parte del Hospital de Rehabilitación de Burke, en Nueva York, añade que los movimientos normales de la mandíbula –hablar, comer, bostezar– empujan la cera del oído interno, hacia el oído externo. Todo lo que debes hacer es ducharte regularmente y limpiar el oído externo con un paño de tela.

Prevención natural

Además, ¡la cera es útil! Tiene propiedades antibacterianas que previenen infecciones y ayuda a lubricar el canal auditivo, lo cual evita la piel seca y la picazón, apunta Audiology Associates of Westchester.

Recuerda consultar a un médico de confianza ante cualquier duda sobre la salud de tus niños.

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