Según un nuevo estudio por la Unidad de Investigaciones sobre el Cáncer en Kansas City, pacientes que toman una aspirina al día puede detener y hasta prevenir el cáncer de mama.
Los científicos determinaron que la aspirina crea un ambiente alrededor de las células cancerosas en el seno que detiene su crecimiento.
También descubrieron que al tomar una aspirina al día, las pacientes podían reducir la posibilidad de que el cáncer regresara en cinco o 10 años.
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El equipo estudio células de mama cancerosas que fueron expuestas a diferentes dosis de aspirina. El resultado fue que muchas de las células se murieron, y las que no se murieron perdían la habilidad de desarrollarse y de crecer después.
Aunque falta hacer unas pruebas más, este estudio puede traer muchos cambios positivos en los tratamientos para el cáncer de seno. Se puede usar la aspirina como una droga preventiva, antes de desarrollar el cáncer, y también se puede dar después de quimioterapia como un régimen diario para prevenir la recurrencia.
Los expertos recomienden consultar con tu médico antes de empezar un régimen de aspirina ya que también tiene sus propios riesgos.
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