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Descubre qué sucedería con el desarrollo infantil, ante el uso excesivo de pantallas

Todo padre sabe que las pantallas ayudan cuando los niños se aburren o están inquietos. Pero, ¿qué consecuencias tienen en su desarrollo?

En la sala de espera del médico, en un silencioso restaurante, en un viaje largo en carro... Son muchísimos los lugares y situaciones en que los padres recurren a las pantallas para mantener a los bebés y niños entretenidos. Pero, ¿qué efecto tiene ese hábito en los pequeños? Un nuevo estudio trae preocupante información al respecto.

Impacto negativo en el desarrollo

Pasar un tiempo excesivo frente a las pantallas podría tener efectos serios en el desarrollo a largo plazo de los niños, dice un estudio publicado en la revista científica Journal of the American Medical Association, en enero de 2019. 

Específicamente, se realizó una observación de 2,400 niños en desarrollo en Canadá. Entre ellos, pasar mucho tiempo delante de pantallas entre los 2 y 3 años se habría asociado a un peor desempeño al medir el desarrollo entre los 3 y los 5 años.

Novedosos hallazgos

Aunque este no es el primer estudio que muestra que el uso exagerado de pantallas puede tener un impacto en el desarrollo, sí es el primero que confirma sus efectos a largo plazo, se explica en Healthline.

"En este estudio, seguimos a los niños a lo largo del tiempo y mostramos que un mayor tiempo frente a las pantallas entre los 2 y 3 años predice peores resultados cuando esos mismos chicos tienen 3 y 5 años, respectivamente", indica Sheri Madigan, autora principal del estudio, en diálogo con el sitio mencionado.

¿Qué puedes hacer?

Si te preocupa el tiempo que tus hijos pasan frente a las pantallas, checa las recomendaciones de la Academia Americana de Pediatría:

- Los menores de 18 meses no deberían usar pantallas, excepto para videollamadas. 

- Entre los 18 y 24 meses, los padres deberían elegir contenido de calidad y verlo junto a sus hijos. 

- Entre los 2 y los 5 años, el tiempo debería limitarse a 1 hora por día y seguir eligiendo contenido de calidad y viéndolo con los pequeños.

- Desde los 6 años en adelante, deben ponerse límites con respecto al tiempo y al tipo de contenido. 

Además, el tiempo frente a las pantallas podría reemplazarse con juegos interactivos, lectura y actividades artísticas o manualidades, aconseja Alex Dimitriu, psiquiatra, en diálogo con Healthline.

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Ante cualquier duda, siempre consulta a tu médico de confianza.

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