Las medidas de salud pública que se han tomado debido a la crisis generada por el coronavirus han cambiado dramáticamente nuestras vidas y la manera en que muchas industrias operan. Aquí te presentamos algunos de los mayores cambios económicos a los cuales nos enfrentamos.
El trabajo remoto será permanente
Las normas de distanciamiento social han acelerado el proceso hacia un incremento en el trabajo remoto. A pesar que, la pandemia del coronavirus, probablemente llegará a su fin con la llegada de una vacuna o un tratamiento eficaz, es probable que no todos regresemos a trabajar a la oficina, pues muchas empresas verán que el trabajo remoto puede ser productivo y les permitirá ahorrar.
El auge en el trabajo desde casa tendrá varios efectos. El primero (y más obvio) es que permitirá que muchas personas opten por vivir en zonas menos costosas, ya que no será necesario vivir cerca de la oficina para facilitar el transporte. Esto, le ahorrará muchísimo a los empleados que antes vivían en zonas costosas o que manejaban a diario a sus trabajos.
Pero el otro efecto de esta tendencia es que las empresas ya no necesitaban de tantas oficinas, y el costo de la propiedad comercial bajará. Las ciudades grandes o costosas, tales como Nueva York, San Francisco y Seattle, podrán verse más afectadas, mientras sus habitantes buscan áreas metropolitanas más económicas para vivir.
Ciertas industrias se benefician, mientras otras caen
Los sectores de la salud, tecnología, farmacéuticos y la industria de entrega a domicilio se beneficiarán. Pero la industria de viajes (como hotelería, cruceros, y aerolíneas), tanto como los de entretenimiento (como eventos deportivos y conciertos) sufrirán. Aunque eventualmente volverá a surgir el interés de viajar y asistir a eventos públicos, todo va a cambiar de manera radical. Es probable que una gran cantidad de personas opten por ver sus conciertos favoritos en línea o por la televisión, mientras que viajar en avión o tomar un tren podría requerir más distanciamiento o revisiones de salud. Algunos argumentan que viajar en avión volverá a ser un lujo, con más espacio o menos pasajeros a bordo.
La carrera para encontrar tratamientos eficaces y una vacuna contra el coronavirus propulsará grandes desarrollos farmacéuticos, tanto en la medicina general como en la biotecnología. Estas industrias se beneficiarán de una mayor inversión gubernamental y privada hacia el desarrollo de nuevos tratamientos, tal como sucedió en la Segunda Guerra Mundial. Esto generará tratamientos más eficaces no solo para el coronavirus, sino también para un gran rango de enfermedades y condiciones.
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Comer en restaurantes será más costoso
Es una triste realidad que algunos restaurantes no sobrevivirán el distanciamiento social, y que por lo tanto, los restantes serán transformados. Sus nuevas características serán:
Menos mesas con más distancia entre ellas; más establecimientos al aire libre; y debido a una menor oferta, la comida podría ser mas costosa.
Muchos otros restaurantes se dedicarán principalmente al servicio a domicilio o "take-out", en lugar de operar con un menor número de mesas o un menú más caro. Además, la tendencia de comer en casa, a la cual nos hemos habituado durante la cuarentena, no desaparecerá de inmediato.
Mayor inversión en salud pública
Es probable que la pandemia del coronavirus lleve a darle más importancia al tema del acceso equitativo de la atención medica. Seguramente habrá mayor inversión en salud pública, así como un aumento en los fondos estatales y subsidios. El debate sobre los fondos para Medicaid y Medicare, como los costos y el manejo de los seguros privados de salud, tomarán mayor importancia.
Por otra parte, también despegará la telemedicina, haciendo que las visitas al médico sean más rápidas, quizás menos costosas y con mayor flexibilidad de horarios para enfermedades comunes. El modelo hospitalario también cambiará, con mayor enfoque en situaciones complejas, crujías, servicios de laboratorio y partos, dejando así muchas especializaciones dedicadas solo a la telemedicina.
Educación en línea
Probablemente, los costos educativos disminuirán, pues muchas instituciones educativas estarán mejor equipadas para brindar clases por internet. Muchas universidades, tanto como escuelas primarias y secundarias, tendrán mayor oferta de educación cibernética. Esto ampliará las opciones para educar a su familia de manera económica y flexible.
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Las tasas de interés seguirán bajas
El caos económico causado por el coronavirus motivó al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a bajar las tasas de interés y esto te beneficiará grandemente. En muchos casos se han llevado a cero, siguiendo el paso de otras economías desarrolladas, como Alemania y Japón. Esto significa que nuestros ahorros se verán afectados, pues los CDT, cuentas de ahorro tradicionales, y los bonos rendirán menos intereses. Siendo así, muchos optarán por alternativas de inversión, como lo puede ser el mercado de acciones o bienes raíces.
Hablando de las propiedades, esta es una excelente oportunidad para refinanciar tu hipoteca con una tasa de interés más baja, lo cual te podría ayudar a ahorrarte miles de dólares en tu préstamo.
Sin embargo, los que deseen comprar una propiedad nueva, deberán tener un buen crédito y flujo de ingresos, pues muchas instituciones financieras ya están subiendo sus estándares para préstamos. Así que, aunque es posible que los precios de las casas bajen si la situación económica empeora, será más difícil obtener una hipoteca sin tener buen crédito, y una cuota inicial saludable.
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