Adele, quien en 2014 ganó una demanda contra una agencia por difundir imágenes de su hijo, impactó al mundo entero cuando reapareció después de su divorcio, pues tenía ya 68 kilos menos de peso. Sin embargo, un sector importante de sus seguidores se sientieron “traicionados” porque presuntamente, la cantante inglesa se había dejado llevar por los estándares de belleza de la industria.
Sin embargo, es hasta ahora cuando la intérprete de ‘Rolling in the deep’ les responde a sus fanáticos sobre sus severas acusaciones y confesó la real crisis de salud mental que la llevó a bajar de peso.
Fue en una charla con el programa ‘Desert Island Discs’, de la BBC Radio, donde Adele confesó todo lo que sufrió antes de adelgazar tantos kilos y lo mal que se sintió cuando fue señalada de “traicionera”.
“Me sentí terrible por algunas personas que sentían que los comentarios de otras personas significaban que no se veían bien o que no eran hermosas. Algunos de los que vi eran jóvenes, tenían como 15 años y hubo otras personas que se sintieron muy traicionada por mí, diciendo: ‘Oh, ella se dejó llevar por la presión”, recordó la cantante.
Lo anterior no fue todo, pues la intérprete británica tuvo problemas de salud mental, ya que sufrió de ansiedad, no podía descansar, ni dormir, pero notó que cuando comenzó a hacer ejercicio le ayudó bastante.
“Lo que realmente no me molestó porque no estaban sosteniendo mi mano a las 4 de la mañana, cuando estaba llorando por ansiedad y necesitando una distracción”, dijo contundentemente Adele, quien fue condecorada por el Príncipe Carlos.
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