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Un doctor le dijo que el sexo era doloroso debido a su edad. Resultó ser cáncer de ovario

“Me envió un correo que decía que la prueba de Papanicolaou había salido bien y un 'Nos vemos en un año”, recuerda Mara Kofoed.

Por Mara Kofoed y A. Pawlowski — TODAY

Mara Kofoed, de 45 años, fue diagnosticada con cáncer de ovario en diciembre de 2021 después de meses tratando de descifrar sus síntomas confusos y aparentemente no relacionados. Descubrió que los médicos los descartaban y no los relacionaban con un tumor.

Terminó en una sala de emergencias en donde finalmente obtuvo respuestas. Kofoed, que vive en Hudson Valley, Nueva York, comparte su historia con TODAY:

Fue el mayor impacto de mi vida descubrir que tenía cáncer de ovario. Habría sospechado que tal vez tenía cáncer de mama porque mi abuela lo tenía, pero el cáncer de ovario estaba muy, muy fuera del radar.

Las mujeres necesitan ser informadas sobre esto. Conocemos el cáncer de mama, pero casi nadie podría mencionar los síntomas del cáncer de ovario; yo no podría haberlos mencionado. Están todas estas cosas pequeñas, y es muy difícil para las personas juntarlas todas. El médico tampoco logró hacerlo.

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En 2017, comencé a sentir un poco de dolor durante las relaciones sexuales. Eso fue lo primero. Otro síntoma temprano fue una sensación un poco diferente alrededor de mi uretra. Pensé: “se siente como una infección de vías urinarias, pero es diferente”. Se sentía como si algo estuviera presionando mi vejiga.

También hubo un cambio en mis patrones de micción: me levantaba por la noche para orinar, lo cual era nuevo y diferente para mí. También iba a orinar con más frecuencia durante el día.

Tenía fatiga sin una explicación. También sufría de estreñimiento.

La fatiga era uno de los síntomas. "Algunos días, simplemente estás sentado en el sofá diciendo: 'Dios, estoy muerto", dijo Kofoed.
La fatiga era uno de los síntomas. "Algunos días, simplemente estás sentado en el sofá diciendo: 'Dios, estoy muerto", dijo Kofoed.Cortesía Mara Kofoed

En mayo de 2021 comencé a notar que mi cintura era más gruesa. Normalmente soy muy delgada y esbelta, así que solo noté un grosor alrededor de mi vientre. Estaba flaca en otras áreas, parecía que había subido un poco de peso, pero solo debajo de las costillas.

Escuché que la hinchazón era un síntoma de cáncer de ovario, pero es un síntoma muy vago. Todavía ni siquiera estaba pensando en el cáncer. No sabía lo suficiente sobre lo que debía buscar. La hinchazón ocurre porque los tumores están creciendo y hay líquido rodeándolos, una condición llamada ascitis.

Describir la hinchazón es engañoso. Pensamos en la hinchazón como gases que provienen de comer algo. Pero la gente no conecta eso con los ovarios, por lo que necesita un lenguaje diferente. Es un área del abdomen engrosada que es persistente y luego se convierte en un vientre hinchado.

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Empecé a tener pequeños dolores en los ovarios, pequeños pellizcos y punzadas. También tuve un par de episodios con dolor de ovario extremo en los que me inclinaba, agarraba la encimera y le decía a mi esposo que algo andaba muy mal.

Visité al primer ginecólogo con el que pude conseguir cita, que no fue hasta el 30 de noviembre de 2021. Le conté todos los síntomas y mi vientre era muy grande, pero no fue como llegar y decir: “Estoy lista para que me hagan una prueba de cáncer de ovario”. Todavía no tenía idea de lo que estaba mal conmigo. No estaba uniendo estas cosas, no sabía que todas estaban relacionadas.

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Él ignoró casi todos los síntomas que mencioné, pero se concentró en uno. Se recostó en su silla y me dijo: “Las mujeres de tu edad dejan de querer sexo y así se secan”. Se estaba concentrando en la parte del dolor durante el sexo.

Esta foto muestra el vientre distendido de Kofoed.
Esta foto muestra el vientre distendido de Kofoed.Courtesy Mara Kofoed

No parecía preocupado por el tamaño de mi vientre. Yo quería que me realizaran una tomografía, pero él dijo: “No la necesitas”. Salí de esa cita completamente traumatizada por lo que me dijo, cómo me ignoró y descartó lo que estaba diciendo.

Su oficina me envió un documento por correo que decía que la prueba de Papanicolaou había salido bien y un “Nos vemos en un año”.

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Una semana y media después de esa cita, el 10 de diciembre, fui a un centro de urgencias local fuera de la carretera un viernes por la noche porque no creía que pudiera pasar el fin de semana.

El vientre hinchado era tan extremo que afectaba severamente mi caminar, respirar, comer, beber, dormir, sentarme e ir al baño. Estaba agregando presión a cada órgano, tan intenso que pensé que podría morir. Fue una de las cosas más dolorosas y aterradoras que he experimentado.

Le conté a la enfermera todos mis síntomas. Miró mi vientre y se lo tomó en serio. Ella supo de inmediato que esto no era normal y dijo: “Tienes que ir a la sala de urgencias esta noche y hacerte una tomografía computarizada”.

En la sala de urgencias, los médicos regresaron después de la exploración y dijeron que encontraron una masa. Necesitaba ver a un oncólogo inmediatamente.

Resultó ser cáncer de ovario en etapa 3C. Cada ovario tenía un tumor: 4.7 pulgadas de un lado, 2.5 del otro. Había dos tumores más pequeños en el recto y la vejiga que medían casi dos pulgadas. Apenas una semana y media antes, el médico me examinó y los pasó por alto.

Kofoed tuvo que someterse a quimioterapia.
Kofoed tuvo que someterse a quimioterapia.Courtesy Mara Kofoed

Me sometí a una cirugía de citorreducción el 28 de diciembre de 2021. Me sacaron los ovarios, las trompas, el útero, el cuello uterino y el epiplón, que es un revestimiento que mantiene todo unido.

También recibí seis tratamientos con dos medicamentos de quimioterapia. Hoy lo estoy haciendo muy bien. Me cuidé muy bien durante los tratamientos de quimioterapia.

Si hubiera esperado un año para mi próxima cita, como me aconsejaron en el consultorio de ese médico, hubiera significado la muerte. No hubiera durado un año.

Una de las cosas más importantes a las que las mujeres deben prestar atención es a sus pensamientos. ¿Te estás diciendo a ti mismo: “Esto es extraño. Esto no es normal. Me pregunto qué es esto?”.

El mensaje más importante de todos con esta enfermedad es: si hay un síntoma persistente, que sigue apareciendo o tal vez no desaparece en absoluto, eso es muy preocupante.

Esta entrevista fue editada y resumida para mayor claridad.

Si quieres leer esta nota en su versión original en inglés ve aquí.

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