La boda de Marc Anthony y Nadia Ferreira ha sido catalogada como 'la boda del año' debido a la cantidad de celebridades que se reunieron en ella y al lujo con la que fue llevada a cabo, sin embargo, antes de que los novios se juraran amor eterno y la pista de baile se llenara, el salsero y la modelo habrían firmado un importante documento.
Se trata de un acuerdo prenupcial, un instrumento legal con el que se pacta lo que sucedería económicamente en caso de que el matrimonio no tuviera éxito y terminara disolviéndose.
De acuerdo con diversos reportes, Marc no quería recurrir a este documento porque está convencido de que su amor por Nadia es para siempre, sin embargo, su representante legal le habría exigido que este proceso se realizara.
Varios medios de comunicación señalan que en caso de que la pareja se divorcie, Nadia percibiría 25,000 dólares mientras permanezca soltera; esto quiere decir que cuando la modelo inicie una relación formal o se case de nuevo dejara de recibir esta cantidad.
Si Marc y Nadia llegan a tener hijos, situación que podría ocurrir pronto ya que se rumora que la ex reina de belleza está embarazada y por eso se aceleraron los planes de la boda, será un juez quien determine el monto que el cantante deberá otorgar para la manutención de su o sus hijos.
La firma de este acuerdo no es nada nuevo para el boricua ya que, en sus matrimonios anteriores, con Dayanara Torres, Jennifer Lopez y Shannon de Lima, también realizó este papeleo.
La boda se puso buena
Después de que este asunto legal quedó en orden, los novios disfrutaron de una velada espectacular en el Pérez Art Museum de Miami, en donde se dieron cita celebridades de la talla de David Beckham, Salma Hayek, Maluma, Prince Royce, Nicky Jam, Marco Antonio Solís y varios más.
Se dice que para la cena los invitados degustaron platillos típicos de Paraguay, país de donde es originaria Nadia, mientras disfrutaban de una espectacular vista del mar.
La novia lució dos hermosos vestidos diseñados por Galia Lahav en color blanco, con adornos de cristales, flores y tul. El novio optó por un traje tradicional y muy elegante de la firma Gucci.
Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia fue el desfile de la novia hacia el altar, acompañada de su padre, instante en el que se le vio a Marc derramar algunas lágrimas por la emoción.
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