Marcia Mendoza, una migrante sin documentos originaria de Guatemala, narró cómo evitó que la operaran para quitarle el útero en un centro ICE en Georgia. La joven de 20 años asegura que vivió los ocho meses más amigos de su vida, pues habría intentado esterilizarla el ginecólogo Mahendra Amin tras haberle diagnosticado erróneamente tumores en sus ovarios. “Me revisó muy brusco, muy rápido y nunca me mostró la pantalla en el ultrasonido”, dijo Marcia. La joven había consultado al médico por manchas blancas en su pecho y jamás se imaginó que él iba a intentar operarla. Ella se negó a ser intervenida alegando a que tenía derecho absoluto sobre su cuerpo y pudo escapar, pero sostiene que no es la única, ya que decenas de sus compañeras del mismo centro de detención atravesaron la misma pesadilla.
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Su testimonio concuerda con la denuncia de una enfermera del centro de detención y que dio paso a las investigaciones federales. ICE envió un comunicado donde asegura que están cooperando con el Departamento de Justicia para que las detenidas sean entrevistadas. Por su parte, el abogado del doctor Amin comentó: “Esperamos que todos los hechos salgan a la luz y confiamos que, una vez que lo hagan, el Dr. Amin será absuelto de cualquier irregularidad”. Marcia Mendoza está luchando por su caso de asilo en Estados Unidos por ser víctima de violencia doméstica en Guatemala.
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