En el último día de su gira por Nueva Zelanda y Australia, la duquesa Meghan Markle dejó a todo el mundo con la boca abierta al aparecer con un vestido de rayas negras y azul marino, dejando al descubierto su ropa interior.
Markle y el príncipe Harry aparecieron en una de las calles de Rotorua para saludar a la gente, pero las miradas se detuvieron inmediatamente en la falda de la duquesa, que era de la marca Givenchy.
Foto: Getty Images
Bajo cierta luz, las rayas de su vestido se transparentaban, causando gran revuelo en medios internacionales, pues mostraban sus piernas y la línea de sus pantaletas.
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El sitio Daily Mirror publicó que se desconoce si fue un error de vestuario o una decisión consciente por parte de la duquesa de Sussex, quien hace unos días apareció con la etiqueta de su vestido colgando de la prenda.
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La razón por la que Markle eligió esta falda fue porque la diseñadora Claire Waight Keller, que confeccionó la prenda, fue la encargada también de realizar su vestido matrimonial, así como los vestidos de sus damas de honor, en la boda que se celebró en mayo pasado.
La pareja real realizó su primer gira internacional por Australia, Fiyi, Tonga y Nueva Zelanda, con un total de 76 visitas oficiales, aunque Meghan tuvo que tomarse algunos días de descanso debido a su embarazo.
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