Conforme los niños van creciendo llega a una edad difícil en la que a los padres cada vez se les dificulta más descubrir cómo se sienten y en qué piensan. Por ello, es más complicado saber cuando los cambios de temperamento de un adolescente se convierten en una señal de alarma.
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Es de vital importancia saber cuándo tu hijo está en riesgo de cometer suicidio y vale la pena que te tomes el tiempo de leer las 10 acciones con las que, de acuerdo con el sitio de pediatría Healthy Children, puedes evitar una tragedia que es perfectamente prevenible en tu familia.
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1. No permitas que la depresión o la ansiedad de un adolescente aumente sin control
Probablemente tu hijo simplemente esté teniendo un mal día, pero también podría ser algo más preocupante si este episodio dura más de una par de semanas.Según el sitio de pedriatría, nueve de cada 10 adolescentes que se quitan la vida habían sido previamente diagnosticados con un trastorno psiquiátrico, más de la mitad de ellos con un trastorno del estado de ánimo como la depresión o la ansiedad.
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Otras claras señales de preocupación son el aislamiento, cuando en secreto tu hijo llora para que lo ayudes. “Muchas veces sienten demasiada vergüenza para comunicar su tristeza a otros, incluidos a mamá y papá”, afirma el sitio. Y es un problema mayor para los varones, quienes intentan ocultar sus emociones para evitar mostrar debilidad. No esperes a que tu hijo se acerque a hablarte de sus problemas. Ve a su habitación y siéntate a platicar con él, siempre con amabilidad y comprensión y ofrécele tu ayuda.
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2. Escucha lo que te dije tu hijo adolescente, aún cuando no está hablando
Healthy Children afirma que no todos, pero la mayoría de los jóvenes que están pensando en el suicidio (a lo que se le llama ideación suicida) transmiten su estado mental atormentado por medio de conductas conflictivas. La mala comunicación es un rasgo común que, según estudios, aparece en las familias destrozadas por el suicidio de un hijo o una hija.
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Existen por los general tres o más factores o circunstancias que están presentes al mismo tiempo en la vida del niño cuando él o ella están pensando en quitarse la vida y estas incluyen pero no se limitan a:
Pérdida sentimental: rompimiento de una relación o muerte de un ser querido
Abuso de sustancias
Presión social
Acceso a las armas de fuego
Humillación pública
Una enfermedad crónica
Agresividad o impulsividad
Historial de suicidio en la familia
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Si tu instinto le dice que tu adolescente podría ser un peligro para sí mismo, presta atención a tus instintos y no permitas que se quede solo. En este caso, es mejor exagerar que restarle importancia.
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3. Nunca ignores las amenazas de suicido como un melodrama típico de los adolescentes
Cualquier declaración de un adolescente escrita o verbal que diga "Me quiero morir" o "Ya no me importa nada" debe considerarse con seriedad. Con frecuencia, los menores que intentan suicidarse les dijeron a sus padres en repetidas ocasiones que pretendían matarse, de acuerdo con Healthy Children.
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Investigaciones arrojan que las personas que amenazan abiertamente con suicidarse, en realidad no quieren hacerlo y que la amenaza es sólo un llamado desesperado de ayuda. Pero ¿qué padre o madre se arriesgaría a equivocarse?
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Ante cualquiera de las frases que delate que tu hijo ha perdido el interés en la vida o que pretende despedirse de sus seres queridos, Healthy Children recomienda no sobresaltarse, ni menospreciar las palabras de tu hijo. Por el contrario, debes mostrarte dispuesto a escuchar sin juzgar porque lo que tu hijo está tratando de decirte es: “Necesito tu amor y atención porque siento muchísimo dolor y no puedo con esto yo solo”. Y debes estar ahí para consolarlo.
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4. Busca ayuda profesional de inmediato
Si la conducta de tu adolescente te tiene preocupado, no esperes a comunicarse con el pediatra. Healthy Children recomienda contactar a un proveedor de salud mental en tu localidad que trabaje con niños para que le haga una evaluación a tu hijo lo más pronto posible para que pueda empezar a recibir terapia o asesoramiento si no corre el riesgo de hacerse daño a sí mismo. Sin embargo, si la situación es más crítica, debes llamar a la línea telefónica de ayuda o grupo de apoyo en tu comunidad o acudir a la sala de urgencias si crees que tu niño está considerando seriamente el suicidio o puede hacerse daño a sí mismo.
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5. Comparte sus sentimientos con tu hijo
Hazle saber a tu hijo que no está solo, muéstrale empatía, que todos pueden sentirse tristes o deprimidos a veces, incluso las mamás y los papás. Sin minimizar su angustia, reconfórtalo diciéndole que esos malos momentos no durarán para siempre. Dile que las cosas realmente van a mejorar y que puedes ayudarle durante la terapia y otros tratamientos para que las cosas mejoren para él o ella.
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6. Anímalo para que no se aísle de la familia y los amigos
La mayoría de veces es mejor estar con otras personas que estar solo. Pero el sitio de pediatría recomienda que si tu hijo se niega, no lo obligues e intenta con los otros nueve consejos.
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7. Recomiéndale hacer ejercicio
¿Sabías que la actividad física tan simple como caminar o tan vigorosa como levantar pesas, puede aminorar la depresión leve a moderada?
Esto se debe a que al hacer ejercicio una glándula del cerebro libera endorfinas, una sustancia que se cree que mejora el estado de ánimo y reduce el dolor. Las endorfinas también reducen la cantidad de cortisol en la circulación. El cortisol que es una hormona que se ha vinculado con la depresión.
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Por si fuera poco, el ejercicio distrae a las personas de sus problemas y les hace sentir mejor consigo mismos. Una sesión de ejercicio de entre 30 y 40 minutos al día, de dos a cinco días a la semana puede hacer una gran diferencia y cualquier tipo de ejercicio funciona mientras los jóvenes disfruten la actividad y sean constantes.
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8. Anima a tu hijo para que no se exija demasiado por ahora
Una vez que tu hijo ha empezado una terapia y esta comience a hacer efecto, podría parecer que ya está listo para asumir responsabilidades y grandes tareas pero Healthy Children asegura que esto podría ser muy abrumador y estresante en ese momento. Lo mejor para volver a fomentar la confianza y la autoestima es dividir las tareas grandes en tareas más pequeñas y manejables siempre que sea posible y que tu hijo participe en las actividades que disfrute.
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9. Recuérdale al adolescente que esté bajo tratamiento que no espere resultados inmediatos
Healthy Children afirma que La terapia conversacional o los medicamentos suelen tomar tiempo para mejorar el estado de ánimo, por lo que el adolescente en tratamiento no debe sentirse desilusionado ni culparse si no se siente mejor de inmediato.
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10. Si tienes armas de fuego en casa, guárdalas en un lugar seguro o cámbialas a otro lugar hasta que la crisis pase
Una cifra desgarradora es que el suicido con armas de fuego entre los jóvenes estadounidenses alcanzó su mayor cifra en 12 años en el 2013, la mayoría de las muertes involucraban un arma de fuego que pertenecía a un miembro de la familia, de acuerdo con un informe de el Centro Brady para Prevenir Violencia con Armas de Fuego.
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Cualquiera de estas muertes podrían haber sido evitadas si el arma de fuego no estuviera disponible. Además, si sospechas que tu hijo o hija tiene deseos de suicidarse, sería una buena medida mantener el alcohol y los medicamentos bajo llave; incluso las medicinas de venta libre.
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