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Un importante cambio en el cálculo del reporte de crédito perjudicará a los consumidores con puntaje bajo

Las nuevas reglas pueden encarecer el pago de tarjetas o la compra de autos o casas a millones de estadounidenses.

La compañía que creó el puntaje de crédito más usado en Estados Unidos cambiará la forma de calificar a los consumidores, acrecentando la brecha entre quienes se consideran de bajo y alto riesgo crediticio y posiblemente dificultando que muchos estadounidenses obtengan préstamos, según ha reportado este jueves el diario The Wall Street Journal.

Bajo los nuevos parámetros de Fair Isaac Corp (FICO, en inglés), los consumidores con puntajes ya altos (de aproximadamente 680 o más) que continúen administrando bien sus préstamos probablemente obtendrán un número más alto, mientras que aquellos con puntajes por debajo de 600 que continúen siendo morosos en sus pagos experimentarán una disminución mayor.

En Estados Unidos, las empresas de informes de crédito (las tres principales son Experian PLC, Equifax Inc. y TransUnion), recogen datos sobre los consumidores y los compilan en informes de crédito que luego determinan sus puntajes FICO.

Es sobre la base de esos puntajes que se otorgan los préstamos para tarjetas de crédito, autos, casas, etcétera. El consumidor estadounidense depende en gran medida de préstamos para financiar esas adquisiciones. 

El puntaje de FICO oscila entre 300 y 850. Los consumidores con un FICO de 600 o menos se consideran menos confiables para préstamos, y aquellos con 650 o más tienen más posibilidades de obtener dinero de instituciones financieras.

FICO actualiza su modelo crediticio cada algunos años para reflejar los cambios en el comportamiento de los préstamos al consumidor. Por ejemplo, los cambios de 2014 ayudaron a mejorar los puntajes de crédito de los consumidores.

Un escenario diferente en 2020

En 2020, sin embargo, el panorama es diferente.

De acuerdo con el diario, las pérdidas de préstamos por incumplimiento de pagos siguen siendo bajas en comparación con la última recesión, pero las deudas de los consumidores están en niveles récord.

 Aunque en los últimos años los prestamistas habían pedido a las compañías de calificación crediticia que les ayudaran a encontrar más clientes, ahora les preocupa que los puntajes de crédito estén haciendo que algunos consumidores parezcan más solventes de lo que son y que al final no puedan cumplir con las obligaciones de sus deudas.

De hecho, el presidente ejecutivo de Capital One Financial Corp., Richard Fairbank, advirtió en una llamada de reporte de ganancias que los consumidores de toda la industria podrían no ser tan solventes como sugieren sus puntajes.

Los cambios en los reportes FICO están destinados a compensar en parte los efectos de los acuerdos entre las empresas de informes de crédito y los estados que datan de 2015, según WSJ. Esos -que buscaban eliminar información errónea de los informes de crédito- condujeron a que Equifax, Experian y TransUnion eliminaran la mayoría de los gravámenes y juicios por problemas fiscales de los reportes.

La decisión de adoptar los nuevos puntajes FICO dependerá de los prestamistas, que generalmente pueden decidir qué versión de FICO usar. Una de las nuevas versiones, llamada FICO 10 T, otorgará mayor importancia a los pagos morosos recientes.

Es probable que los consumidores que se retrasen o dejen de pagar sus deudas vean que sus puntajes de crédito caen más con este modelo, mientras que aquellos cuyo último retraso de pago tiene al menos un año podrían ver una mejora en sus puntajes.

En otras palabras, quienes previamente pagaron sus facturas de tarjeta de crédito en su totalidad, pero que pasaron a tener saldos crecientes durante varios meses, probablemente terminarán con un puntaje más bajo, mientras que quienes tienden a aumentar la deuda de la tarjeta durante un mes específico cada año y luego pagarla rápidamente probablemente experimentarán una caída menor en su puntaje, de acuerdo con el citado diario.

Editado por Ivette Leyva.