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Los CDC alertan de que la ropa de cama sigue siendo la principal causa de muerte inesperada de bebés pese a los avisos a padres

Miles de niños menores de un año mueren asfixiados por dormir con peluches, protectores, mantas y otra ropa de cama blanda en las cunas. Éstas son las advertencias de los expertos y cómo estar especialmente atentos.
/ Source: Telemundo

Por Erika Edwards – NBC News

Un estudio de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) reveló que la mayoría de las muertes inesperadas de bebés siguen estando relacionadas con las camas en las que duermen, a pesar de décadas de avisos de seguridad dirigidos a los nuevos padres.

La investigación, publicada este martes en la revista Pediatrics, concluye que las mantas, las almohadas, los protectores, los peluches y las superficies para dormir distintas a la cuna siguen siendo las principales causas de asfixia accidental entre bebés de cuatro meses o menos edad.

El estudio analizó los datos de 4,929 casos de muerte súbita inesperada (SUID, por sus siglas en inglés) entre 2011 y 2017. La ropa de cama blanda se asoció al 72% de los casos. Los bebés muy pequeños son incapaces de evitar el peligro de asfixia que afecta a su capacidad de respirar.

El SUID es la muerte súbita e inesperada de un bebé menor de un año. Incluye el SMSL, o síndrome de muerte súbita del lactante, así como la asfixia accidental en entornos de sueño.

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"También estamos hablando de bebés que se colocan en superficies distintas al moisés o la cuna: un sofá, un sillón reclinable o la cama de un adulto", dijo la autora del estudio, Sharyn Parks, epidemióloga principal de la División de Salud Reproductiva de los CDC. "Estamos viendo bebés que mueren en todas esas circunstancias", agregó.

Sólo el 1% de las muertes analizadas se confirmaron como inexplicables sin que hubiera ropa de cama blanda u otras superficies de descanso inseguras. Los factores del 27% restante no pudieron determinarse por falta de información.

Los casos de SUID disminuyeron considerablemente a mediados de la década de 1990, gracias a una campaña masiva de salud pública llamada "Back to Sleep", que animaba a los nuevos padres a poner a los recién nacidos boca arriba para dormir, en lugar de boca abajo.

Cuando la campaña comenzó, en 1994, casi 4,700 bebés habían fallecido por muerte súbita inesperada el año anterior. En 2010, el número de estas muertes se había reducido a la mitad, según la Academia Americana de Pediatría.

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Desde entonces, los avances se han estancado. Los CDC informan ahora que hasta 3,500 bebés mueren de SUID cada año en Estados Unidos.

"No hemos sido capaces de involucrar a las familias de forma efectiva", dijo Sunah Hwang, profesora de pediatría de la Universidad de Colorado y neonatóloga del Hospital Infantil de Colorado.

Hwang, que no participó en el estudio de los CDC, sugirió que el momento de hablar con los padres sobre las prácticas de sueño seguro debería ser antes del nacimiento del bebé: "Tenemos que mantener esta conversación en las primeras etapas del periodo prenatal. Tenemos que empezar a preguntar a las familias: '¿Cuál es su plan de sueño? ¿Qué tipo de cunas o mochilas de viaje están considerando?”.

"Con demasiada frecuencia, pensamos que es una conversación para después del nacimiento del bebé", dijo Hwang, "en ese momento es demasiado tarde".

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Además, es posible que las conversaciones deban adaptarse a determinados grupos con mayores tasas de SUID.

"Constantemente vemos las tasas más altas entre las poblaciones de indios americanos y nativos de Alaska, seguidas muy de cerca por la población afroamericana", dijo Parks, "queremos encontrar formas de llegar mejor a esas poblaciones y proporcionarles apoyo".

La Academia Americana de Pediatría recomienda que los bebés se acuesten de espaldas sobre superficies firmes y planas, sin almohadas, mantas, juguetes ni protectores de cuna, que son unos acolchados blandos que se colocan en el perímetro de las camas de los bebés.

Los estudios también han demostrado que el uso de chupetes puede reducir el riesgo de muerte súbita del lactante. Los expertos afirman que los chupetes no deben estar unidos a la ropa ni a los juguetes.

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"Además, si es posible, mantén la cuna del bebé en el dormitorio del cuidador durante al menos seis meses, preferiblemente hasta que el bebé tenga un año", dijo Parks.