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Obama despide al congresista John Lewis con un emotivo tributo, en el que pidió actuar para garantizar el voto de las minorías

El expresidente ofreció este jueves un poderoso discurso en homenaje a John Lewis, un gigante de los derechos civiles en el país, en el que instó a los estadounidenses a honrar su legado. Al homenaje en Atlanta asistieron otros dos expresidentes.
/ Source: Telemundo

El expresidente Barack Obama ofreció este jueves un emotivo y poderoso tributo a John Lewis, un gigante de los derechos civiles en el país, en el que instó a los estadounidenses a honrar su legado "metiéndose en buenos problemas", enfrentando a quienes buscan suprimir el derecho al voto, el mismo que el congresista luchó por defender.

Lewis murió el pasado viernes de cáncer. Tenía 80 años.

Este elogio al poder de la votación de parte de Obama llega el mismo día en que el presidente Donald Trump sugirió que buscaría aplazar las elecciones del 3 de noviembre. Trump dijo que el voto por correo (que será históricamente alto este año por la pandemia del coronavirus) lleva a más fraude, lo cual es falso: no hay evidencia que apoye esto y los estudios muestran que la tasa de fraude es de menos del 0.01%.

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Obama habló desde la Iglesia Bautista Ebenezer en el funeral de Lewis en Atlanta, a ratos ovacionado y aplaudido, donde dijo que estaba allí porque tenía una deuda con el congresista de 16 términos y con su "visión contundente de la libertad". Obama, el primer presidente negro del país, habló sobre las instrucciones que le deja la Constitución a todos los estadounidenses para crear una "unión más perfecta".

John Lewis ve por primera vez, en noviembre de 2016, imágenes y su historial de arrestos por liderar una sentada pacífica en restaurantes segregados en 1963 en Nashville, Tennessee.
John Lewis ve por primera vez, en noviembre de 2016, imágenes y su historial de arrestos por liderar una sentada pacífica en restaurantes segregados en 1963 en Nashville, Tennessee.Rick Diamond/Getty Images

En el evento no estuvo Donald Trump, pero sí estuvieron otros dos expresidentes, George W. Bush, republicano, y Bill Clinton, demócrata. También asistieron la familia de Lewis y decenas de legisladores.

Cientos de personas se reunieron afuera de la iglesia, que además era el templo del reverendo y líder de la lucha por los derechos civiles, el Dr. Martin Luther King Jr.

El evento lucía distinto a como tradicionalmente lucen los grandes funerales de los líderes del país: por las precauciones con el coronavirus, la capacidad fue reducida a la mitad, la gente usó mascarilla y se siguió en su mayoría el distanciamiento social en las bancas de la iglesia.

Obama hizo un recorrido de los logros de Lewis en una ceremonia marcada por discursos, oraciones y canciones hasta con un poco de baile, para honrar la "alegría" que personificaba el congresista, explicaron quienes lo homenajearon. 

El expresidente dijo que era “un gran honor estar de regreso en la Iglesia Bautista Ebenezer en el púlpito de su mejor pastor, el Dr. Martin Luther King Jr., para presentar mis respetos a quizás su mejor discípulo, un estadounidense cuya fe fue probada una y otra vez. Un hombre de pura alegría y perseverancia inquebrantable”.

Féretro con los restos del congresista John Lewis.
Féretro con los restos del congresista John Lewis.AP

Obama contó la historia del coraje del congresista en su primer viaje de 'libertad' en un autobús, viajes que hacían quienes protestaban contra el racismo en la década de los años 60, cuando le era prohibido a la gente negra sentarse en la parte delantera del bus. 

"Imaginen el coraje de dos personas de la edad de Malia, más jóvenes que mi hija mayor, solos", dijo el expresidente. “John solo tenía 20 años... pero apostó todo, todo, a que su ejemplo podría desafiar siglos de convención y generaciones de violencia brutal”.

Uno de los llamados del expresidente que más suscitaron vitoreos de la audiencia fue el de honrar la memoria de Lewis, no solo nombrando la Ley de los Derechos Civiles en su honor, sino también extendiendo y fortaleciendo esa ley para asegurar que quienes ven su derecho al voto más vulnerado (sobre todo las minorías como los latinos y negros) puedan votar en estas elecciones. 

Bush y Clinton también compartieron recuerdos personales de Lewis y las lecciones que tanto ellos como el país aprendieron de un ávido defensor de la protesta pacífica. Lewis era el más joven y el último sobreviviente de un grupo de seis grandes activistas antiracismo, encabezados por Luther King Jr.

"Vivimos en un país mejor y más noble hoy gracias a John Lewis", destacó Bush, y Clinton recordó la humanidad, la fuerza y ​​la firme creencia de Lewis en un futuro sin racismo.

El expresidente Bill Clinton habla en el funeral por John Lewis.
El expresidente Bill Clinton habla en el funeral por John Lewis.AP

Hace 55 años, el congresista lideró a unos 600 manifestantes en la marcha conocida como el 'Domingo sangriento' (Bloody Sunday, en inglés) en el puente Edmund Pettus en Selma, Alabama, donde soldados estatales le fracturaron el cráneo.

Hoy hay varias peticiones de activistas y políticos por cambiarle el nombre a ese puente en honor a Lewis.

El presidente Trump en cambio solo envió un mensaje de condolencia en Twitter varias horas después de la muerte del congresista y ordenó que las banderas ondearan a media asta por un día. “Triste de escuchar la noticia del fallecimiento del héroe de los derechos civiles John Lewis. Melania y yo dedicamos nuestras oraciones a él y su familia”, escribió en esa red social.

Lewis anunció a finales del año pasado que le habían diagnosticado cáncer de páncreas en estado avanzado, pero eso no frenó su activismo hasta tiempos muy recientes.

Cuando el asesinato de George Floyd a manos de la policía en Minneapolis, Minnesota, desató una oleada de indignación a lo largo del país en mayo, Lewis dijo: "La justicia se ha negado durante demasiado tiempo". Asimismo, hizo un llamado a la protesta pacífica. "Disturbios, saqueos e incendios no son la forma. Organízense. Manifiéstense. Siéntense. Levántense. Voten. Sean constructivos, no destructivos".

Lewis fue parte de la Cámara de Representantes, donde se le llamaba la "conciencia del Congreso", por 17 términos, desde 1987. Allí votó y habló en contra de las intervenciones militares estadounidenses, como la Guerra de Irak.

En los años, Lewis 60 fue arrestado 40 veces, cinco más como congresista. A los 78 años, dijo que seguía listo para afrontar ese castigo con tal de ayudar a reunir a las familias inmigrantes separadas en la frontera por la administración Trump.

"No puede haber paz en Estados Unidos hasta que estos niños sean devueltos a sus padres", dijo Lewis. "Si no lo hacemos, la historia no será buena con nosotros", dijo. “Iré a la frontera. Seré arrestado nuevamente. Si es necesario, estoy preparado para ir a la cárcel", agregó.