Por Scott Wong - NBC News
WASHINGTON — La mayoría lograda por el Partido Republicano en la Cámara de Representantes será más pequeña de lo esperado, pero le permitirá usar sus nuevos poderes de supervisión y aprobar sobre una serie de proyectos de ley para contrarrestar la agenda del Gobierno que preside Joe Biden.
Ante el actual contexto político y de feroz partidismo, quizá es apropiado que los conservadores estén liderados por los representantes Kevin McCarthy, por California, y Steve Scalise, por Louisiana, veteranos legisladores más conocidos por sus habilidades en la arena política que por su perspicacia.
Aunque los republicanos de la Cámara de Representantes seguirán enfrentándose a una Casa Blanca y un Senado demócratas que pretenden bloquear sus objetivos legislativos, McCarthy -posible próximo portavoz de la Cámara de Representantes- ya ha dejado claro que el partido planea lanzar investigaciones sobre la Administración Biden y al menos uno de los miembros de la familia del presidente, su hijo Hunter.
Pero McCarthy y otros líderes conservadores tendrán dificultades para mantener unida su delgadísima mayoría y aislar a las voces más críticas del partido, que exigen el cierre del Gobierno e impugnar a Biden.
“La era del gobierno unipartidista de los demócratas en Washington ha terminado. Washington tiene ahora un control y un equilibrio. El pueblo estadounidense tiene voz y voto en su Gobierno”, alardeó McCarthy, flanqueado por su nuevo equipo de liderazgo, el martes tras ganar su contienda para ser el candidato del partido a la portavocía de la Cámara.
Así será el nuevo 118º Congreso bajo el gobierno del GOP de la Cámara:
Investigaciones
Las investigaciones dominarán el nuevo Congreso, desde los orígenes de la pandemia del COVID-19 y las acusaciones de politización en el Departamento de Justicia, hasta la caótica retirada de Estados Unidos de Afganistán. Pero ninguna atraerá tanta atención como la investigación prevista por el Partido Republicano sobre los negocios de Hunter Biden, dos años antes de que el mandatario se presente probablemente a la reelección.
El representante James Comer, republicano por Kentucky y presidente entrante del Comité de Supervisión, ha dicho que será prioritario investigar a Hunter Biden y otros miembros y asociados de la familia Biden, ya que los republicanos tratan de determinar si las actividades empresariales de la familia “comprometen la seguridad nacional de Estados Unidos y la capacidad del presidente Biden para gobernar con imparcialidad”.
Los republicanos alegan que Hunter Biden ha utilizado la exitosa carrera política de su padre para enriquecerse. Entró en el consejo de administración de una empresa ucraniana de gas natural en 2019, y una firma de inversión que cofundó ayudó a una empresa china a comprar una mina de cobalto congoleña a una compañía estadounidense en 2016, entre otras cosas.
“Hunter y otros miembros de la familia Biden tienen un patrón de venta ambulante de acceso a los más altos niveles del Gobierno para enriquecerse”, dijo Comer en un comunicado. “El pueblo estadounidense merece saber si las conexiones del presidente con los negocios de su familia se produjeron a costa de los intereses estadounidenses y si representan una amenaza para la seguridad nacional”, señaló
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El menor de los Biden ya está bajo investigación federal, aunque éste ha defendido la legalidad de su acciones.
Comer y los republicanos del Senado, incluyendo a Rand Paul, también están comprometidos en investigar al doctor Anthony Fauci, el director saliente del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, que se convirtió en la cara de la respuesta del Gobierno al COVID-19 — y un objetivo de la derecha.
Otra gran tema será el empeño del congresista Jim Jordan, republicano por Ohio, leal a Trump y antiguo líder del Freedom Caucus de extrema derecha, y que está a punto de presidir el poderoso Comité Judicial, de investigar al fiscal general, Merrick Garland, y al director del FBI, Christopher Wray.
En una carta dirigida a Garland este mes, Jordan adelantó algunas de sus posibles investigaciones el próximo año, instando al Departamento de Justicia a preservar los registros relacionados con su investigación del grupo conservador Project Veritas y cómo obtuvo una copia del diario de la hija del presidente, Ashley Biden, el cierre del programa del Departamento de Justicia de la era de Trump contra el espionaje chino y el registro que hizo el FBI de la mansión de Trump en Florida.
Jordan, un feroz crítico del Departamento de Justicia bajo el mandato de Biden, también presentó un informe de 1,000 páginas sobre las acusaciones de politización del Departamento de Justicia y del FBI, basado en entrevistas con denunciantes de la agencia federal.
Mientras que el comité del 6 de enero de la Cámara de Representantes, que la presidenta Nancy Pelosi puso en marcha a raíz del ataque del Capitolio, se disolverá al final de este Congreso, los republicanos tienen sus propias ideas para los comités selectos de la Cámara en el nuevo año. McCarthy ha prometido crear uno para investigar a China. Y otros miembros republicanos quieren formar un panel especial para investigar la caótica salida de las tropas estadounidenses de Afganistán que ordenó la Administración Biden.
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“Si hay algo que yo diría que es necesario al 100% como comité selecto, tiene que ser Afganistán”, subrayó la congresista Kat Cammack, republicana por Florida, miembro del Comité de Seguridad Nacional que se espera que se presente a un puesto de liderazgo.
Impeachment
Después de que los demócratas de la Cámara de Representantes impugnaran al presidente Donald Trump en dos ocasiones, algunos de sus aliados más acérrimos en el Congreso buscan venganza. La representante de extrema derecha Marjorie Taylor Greene, republicana por Georgia, ha presentado múltiples artículos para impugnar a Biden y Garland en este Congreso, aunque McCarthy dijo que hasta ahora no ha visto nada que lo favorezca.
Sin embargo, no se espera que eso satisfaga a un sector del partido. Un número cada vez mayor de republicanos dice que tiene la vista puesta en la impugnación del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, por su gestión sobre la seguridad en fronteriza sur. En el año fiscal 2022, hubo un récord de 2.76 millones de cruces de migrantes indocumentados, un millón más que en el año anterior, según datos oficiales.
“Está ignorando su deber de ejecutar las leyes de Estados Unidos para asegurar la frontera”, afirmó el republicano Chip Roy, miembro del Comité Judicial de la Cámara de Representantes que representa al estado fronterizo de Texas. “Y como consecuencia directa de eso, los estadounidenses están muertos, los migrantes están muertos, China está empoderada, los cárteles están empoderados, el fentanilo está entrando en nuestras comunidades”, sostuvo.
Roy, miembro del Freedom Caucus y alineado de Trump, dijo que cree que Biden ha tenido una conducta que ha dañado a Estados Unidos.
Legislación
Los demócratas siguen ocupando la Casa Blanca, por lo que cualquier ley que los republicanos aprueben de forma partidista no será firmada por Biden. Pero la mayoría conservadora de la Cámara de Representantes dice que no perderá el tiempo en mostrar las marcadas diferencias de los partidos en su lucha por el control de la Casa Blanca en 2024.
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McCarthy ha dicho que cuando el nuevo Congreso se constituya el 3 de enero, los republicanos de la Cámara votarán inmediatamente para derogar los 80,000 millones de dólares en nuevos fondos para el Servicio Interno de Impuestos (IRS, por sus siglas en inglés) que se incluyeron en la Ley de Reducción de la Inflación de Biden para ayudar a tomar medidas contra los morosos y aumentar la aplicación de la ley.
“Ese mismo día, derogaremos estos nuevos 87,000 agentes del IRS. Creo que el Gobierno debería estar aquí para ayudar, no para perseguir”, dijo McCarthy la semana pasada en Fox Business.
Los republicanos también planean aprobar una Carta de Derechos de los Padres, que daría a los progenitores más voz en los planes de estudio que se enseñan en las escuelas de sus hijos, impulsar la producción nacional de petróleo y gas natural y recortar el proceso de permisos para hacer frente a los altos precios de la energía y el gas, y proporcionar fondos para más agentes de policía y seguridad fronteriza en respuesta a las crecientes tasas de criminalidad.
“Vamos a ir a por todas desde el primer día”, prometió Cammack. “Y a nuestros colegas demócratas les va a parecer casi un latigazo, ya que hemos visto este enfoque tan extraño, lento y displicente de la legislación”.
Sin embargo, una mayoría tan estrecha significa que McCarthy tendrá poco margen de error, y agitadores como Greene, que han mostrado poca deferencia hacia el liderazgo republicano en el pasado, podrían tener una gran influencia en lo que el grupo es capaz de aprobar en la Cámara.
Gasto y deuda
Los republicanos argumentaron durante la campaña electoral que la inflación récord estaba siendo impulsada por los billones de dólares de gasto público que los demócratas están inyectando en la economía. Los demócratas, de su lado, han afirmado que la inflación es un “fenómeno global” estimulado por la pandemia.
Ahora que están en el poder, los republicanos prometen celebrar audiencias sobre las causas del repunte de la inflación y recortar profundamente el gasto para ayudar a frenar la deuda récord del país.
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“Los estadounidenses están pagando esta deuda cada vez que van a la tienda o llenan el depósito de gasolina”, dijo el representante Jason Smith, por Missouri, el principal republicano de la Comisión de Presupuestos que se postula como presidente de la Comisión de Medios y Arbitrios, encargada de redactar los impuestos. “Se está comiendo sus sueldos, y es porque los demócratas han abandonado la presupuestación básica y la supervisión. Los republicanos restaurarán ambas cosas”.
Para lograr sus objetivos de gasto, algunos republicanos han llegado a decir que no apoyarán la ayuda militar adicional para Ucrania el próximo año hasta que se aborden algunas cuestiones internas. Otros republicanos de alto nivel amenazan con bloquear el aumento del límite de endeudamiento del país para obligar a Biden y a los demócratas a revisar los costosos programas de prestaciones sociales como Medicare y la Seguridad Social.
Sin embargo, el impago de la deuda podría asustar a los mercados mundiales y sumir a la economía estadounidense en una recesión. También podría producirse un cierre del gobierno, con el que Greene y otros legisladores de extrema derecha han amenazado en los últimos días.
Smith dijo en una entrevista: “En lo que respecta al techo de la deuda, los estadounidenses esperan con razón que sus funcionarios electos utilicen todas las herramientas que tenemos para arreglar cualquier crisis a la que se enfrente el país, ya sea la subida de los precios, una frontera insegura, el aumento de la deuda, lo que sea”.
“Los republicanos utilizarán todas las herramientas que tenemos para aliviar a los estadounidenses y volver a poner al país en el buen camino”, afirmó.