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Los abogados de Trump restan importancia al discurso del expresidente que incitó el asalto al Capitolio

La defensa del exmandatario abrevió su defensa, aludió a la libertad de expresión, y denunció una "venganza política". Tras las preguntas de los senadores y los alegatos finales se producirá la votación del juicio político.
/ Source: Telemundo

Por Adam Edelman - NBC News

Los abogados del expresidente Donald Trump concluyeron su defensa este viernes después de menos de tres horas de argumentos en las que calificaron como “venganza política” el caso de juicio político elaborado por los fiscales de la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, y alegaron que el discurso que precedió el asalto al Capitolio fue simple "retórica política corriente".

Los abogados defensores también dijeron que las palabras que dijo Trump en el mitin denominado Stop the Steal (Detengan el Robo) del 6 de enero, justo antes de la insurrección violenta en el Congreso, están protegidas por el derecho de libertad de expresión, y que su discurso fue "prácticamente indistinguible del lenguaje que ha sido utilizado por personas de todo el espectro político" durante décadas.

Esta tarde los senadores comenzaron a presentar preguntas por escrito a los representantes de ambas partes, en un proceso que se puede alargar hasta final de esta semana, antes de la votación definitiva. 

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La defensa de Trump se centró principalmente en argumentos técnicos sobre el juicio y el caso que armaron los fiscales, usando opiniones políticas en lugar de presentar una defensa integral de las acciones de Trump en relación con los disturbios.

Abogados de Trump.
De izquierda a derecha, David Schoen, Bruce Castor y Michael van der Veen, abogados del expresidente Donald Trump, llegan al Capitolio en el tercer día del segundo juicio político a Trump en el Senado, el jueves 11 de febrero de 2021, en Washington.AP

No ofrecieron por ejemplo una explicación completa sobre las acciones de Trump durante la violencia en el Capitolio, uno de los argumentos centrales de la fiscalía. Tampoco argumentaron por qué el expresidente no hizo más para detener la violencia una vez que comenzó.

Los abogados revisitaron brevemente las falsas teorías de conspiración de Trump sobre el supuesto robo electoral y sacaron a relucir temas familiares de corte conservador sobre la libertad de expresión y la "cultura de la cancelación".

"Este juicio se trata de mucho más que de Trump. Se trata de silenciar y prohibir el discurso con el que la mayoría no está de acuerdo", dijo Bruce Castor, uno de los abogados, "se trata de cancelar a 75 millones de votantes que apoyaron a Trump y de criminalizar puntos de vista políticos”.

También sugirieron que la una “cultura de cancelación constitucional” se estaba “apoderando” del Senado.

Los abogados argumentaron que Trump no pudo haber incitado al asalto al Capitolio porque este ya había sido planeado previamente por extremistas. E intentaron comparar el efecto que, según los demócratas, tiene Trump en los grupos extremistas de derecha, con el apoyo de algunos demócratas a los manifestantes por la justicia racial en las protestas mayormente pacíficas durante el verano.

Haciéndose eco de un lenguaje que alguna vez fue utilizado con frecuencia por su cliente, el abogado Michael Van der Veen criticó el juicio político de los demócratas como un "acto injusto y descaradamente inconstitucional de venganza política" y una "cacería de brujas con motivaciones políticas".

Y argumentó repetidamente que Trump simplemente estaba alentando a sus partidarios a asegurarse de que los legisladores estuvieran llevando a cabo fielmente la certificación adecuada del recuento de los votos del Colegio Electoral.

"Lejos de promover la insurrección", dijo Van der Veen, "los comentarios del presidente ... alentaron explícitamente a los asistentes [al mitin] a ejercer sus derechos de manera pacífica y patriótica".

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Señaló que en 2016 varios miembros de la Cámara de Representantes plantearon objeciones a los resultados de la victoria de Trump en ese momento, incluyendo al fiscal principal del juicio político, el representante demócrata por Maryland Jamie Raskin.

Michael van der Veen
Michael van der Veen, uno de los abogados defensores de Donald Trump, durante el juicio político en el Senado este viernes 12 de febrero de 2021. AP

Retomando la afirmación de Van der Veen de que las palabras de Trump no fueron peores que otras pronunciadas por otros funcionarios al otro lado del espectro político, el abogado David Schoen reprodujo un extenso material de video en el que varios legisladores demócratas, así como Joe Biden y Kamala Harris, instaban a sus partidarios a "luchar". Schoen argumentó que nadie había interpretado esas palabras como un llamado literal para luchar físicamente como lo han hecho los demócratas con Trump.

Al comienzo del extenso video, los senadores demócratas en la sala mostraron en su mayoría rostros impávidos. Pero esto cambió rápidamente, a medida que se reproducían más clips. Hubo constantes murmullos en la sala, muchos susurros, algunas risas y algunos se pasaron notas escritas.

Más tarde, Van der Veen reprodujo otro material de video que incluía muchos de los mismos clips, y en el que aparecía la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, diciendo: "No sé por qué no ocurren levantamientos todo el tiempo".

El abogado dijo que con los videos estaba tratando de defender la premisa de que "todo discurso político debe ser protegido". "Y debería estar protegido de manera uniforme para todos nosotros", añadió.

En otro momento, Van der Veen continuó argumentando que Trump no pudo haber incitado a la multitud que irrumpió en el Capitolio porque, dijo, estas personas habían estado planeando su ataque durante semanas antes del mitin del 6 de enero. "No es posible haber incitado a algo que ya iba a suceder", dijo.

Van der Veen también dijo que extremistas "de varias creencias diferentes" habían "planeado previamente el ataque al Capitolio" y "secuestraron el evento para sus propios fines", incluidos miembros de Antifa. No hay evidencia de que ningún miembro de Antifa estuviera involucrado en los disturbios. Por el contrario, como dijeron los fiscales demócratas durante sus alegatos, los asaltantes estaban mayormente vinculados a grupos extremistas de derecha como los Proud Boys.

Más tarde, Schoen argumentó que a Trump se le había negado el debido proceso debido a la rapidez con que ocurrió la votación en la Cámara Baja y acusó a los fiscales de manipular algunas de las pruebas que presentaron durante sus argumentos durante los últimos dos días.

Los abogados dijeron en repetidas ocasiones que el juicio político no cumplió con los altos estándares legales que se esperan en un caso penal, a pesar de que el juicio político es un proceso político, no legal, y el Senado no es un tribunal de justicia.

La pequeña cantidad de tiempo usada por el equipo legal de Trump sugiere que el juicio podría tener una conclusión rápida.

Y debido a que se espera que ninguna de las partes solicite presentar testigos, los argumentos finales, y una votación final sobre si el expresidente es condenado o no, podrían ocurrir antes de que termine el fin de semana.

Ambas partes están ansiosas por terminar el proceso, ya que los demócratas necesitan tiempo en el Senado para avanzar en su proyecto de ley de alivio económico por el COVID-19, mientras que los republicanos también desean dejar atrás el juicio y las incómodas preguntas que este plantea.

 La defensa de Trump se produjo un día después de que los fiscales demócratas concluyeran de exponer su caso contra Trump, enfocándose en el daño que sus partidarios causaron en el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero y argumentando que este precedente podría incitar a más violencia si no es castigado.

Esta dinámica marcó el final de dos días de presentaciones metódicas y a veces emocionalmente desgarradoras por parte de los demócratas, que incluyeron la proyección de imágenes gráficas y devastadoras nunca antes vistas desde el interior del Capitolio durante el asalto.

Para declarar culpable a Trump se necesita el voto de 67 senadores, incluyendo al menos 17 republicanos.

Esta semana, ya 44 de los 50 republicanos en el Senado han votado para declarar inconstitucional todo el proceso del juicio, argumentando que Trump ya no es presidente. Es muy poco probable que alguna evidencia los persuada de cambiar de opinión.

Sin embargo, la sesión de preguntas y respuestas en el juicio al final de la tarde de este viernes podría traer más claridad sobre lo que piensan algunos senadores republicanos.

Trump es el primer presidente que ha sido sometido a juicio político dos veces por la Cámara de Representantes, y es el primero en ser juzgado en el Senado. Trump fue acusado el 13 de enero por el cargo de "incitación a la insurrección", debido a su papel en el asalto al Capitolio.