La Casa Blanca dijo este sábado que los abogados del presidente, Joe Biden, encontraron esta semana más documentos clasificados en su residencia de Wilmington (Delaware), de los que se había informado inicialmente.
Se encontraron un total de seis páginas de documentos clasificados durante una búsqueda en la biblioteca privada de Biden el jueves, aunque la Casa Blanca dijo inicialmente que solo se había hallado uno.
Los documentos pertenecen a la época en la que fue Joe Biden fue vicepresidente, durante las dos Administraciones de Barack Obama (2009-2017).
Richard Sauber, abogado de la Casa Blanca, explicó en un comunicado que los papeles adicionales fueron hallados por él mismo el jueves. El primer documento fue hallado ese día por los abogados personales de Biden, dijo, pero estos no tenían autorización para hacer la búsqueda y se detuvieron.
Sauber agregó que el Departamento de Justicia, que investiga el hallazgo de estos y otros documentos clasificados del Gobierno en distintas oficinas de Biden en los últimos meses, “inmediatamente tomó posesión” de los papeles.
La Casa Blanca había anunciado el jueves el hallazgo de un documento clasificado en un almacén en el garaje de la residencia personal del presidente en Delaware.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, anunció el jueves el nombramiento de un fiscal especial para investigar los materiales clasificados encontrados en la casa de Biden, así como otro "pequeño grupo" hallado en un clóset bajo llave, en una antigua oficina en Washington.
Uno de los documentos hallados en esa oficina llevaba la marca de información ultrasecreta/sensible, el nivel más alto de clasificación que tiene el Gobierno.
Biden enfrenta escrutinio por no haber informado antes del hallazgo del primer grupo de documentos, pues se informó este mes a pesar de haber sido hallados días antes de las elecciones de medio término, el 8 de noviembre.
Líderes republicanos, incluyendo al expresidente Donald Trump, han exigido órdenes de cateo contra Biden, quejándose de que la residencia de Mar-a-Lago (Florida) de Trump fue requisada por el FBI en agosto, en relación con cientos de documentos secretos del Gobierno que aún estaban en su poder, a pesar de que sus abogados habían dicho que ya se habían devuelto.