El liderazgo demócrata en el Senado ofreció más detalles sobre la propuesta legislativa de 3.5 billones de dólares que anunciaron el martes por la noche.
En un almuerzo este miércoles con el presidente, Joe Biden, y sus compañeros de bancada, los senadores Chuck Schumer, líder de la mayoría; Bernie Sanders, presidente del Comité de Presupuesto, y Mark Warner, vicepresidente del caucus demócrata explicaron los principales puntos del amplio paquete de medidas económicas y sociales.
"Es genial estar en casa", le dijo Biden a los periodistas al salir de la reunión en el edificio donde pasó 36 años como senador por Delaware. "Es increíble estar con mis colegas y creo que vamos a lograr muchas cosas".
Schumer indicó que este monto sería adicional a los 579,000 millones de dólares del acuerdo bipartidista en infraestructura.
El paquete se divide en tres grandes rubros: salud, reforma fiscal y crecimiento económico a largo plazo.
Incluye el recorte en impuestos más ambicioso de las últimas décadas para las familias de ingresos medios, mediante la extensión más allá de 2021 del crédito fiscal por hijo de 3,600 dólares, que empezará a llegar a partir de este jueves. Fondos para combatir el cambio climático y, posiblemente, propuestas de inmigración.
El plan puede salir adelante sin apoyo republicano mediante una fórmula legislativa conocida como reconciliación, que permite aprobar un proyecto de ley con una mayoría simple (justo la que tienen los demócratas en el Senado), puesto que el bloqueo de los conservadores a las políticas progresistas impediría alcanzar un acuerdo más amplio.
Sin embargo, los demócratas deberán negociar el apoyo de todos sus senadores (50, frente a 50 republicanos), puesto que una sola deserción sería suficiente para hacer fracasar la medida (en caso de empate, el voto de la vicepresidenta, Kamala Harris, inclina la balanza).
Este proceso de reconciliación sólo se puede usar dos veces en la legislatura, y ésta sería la última, lo que convierte este paquete en posiblemente la única oportunidad para aprobar medidas ambiciosas bloqueadas por los republicanos, y entre ellas, quizá, una reforma migratoria que abra un camino a la ciudadanía a dreamers y trabajadores del campo.
- Inmigración: Los congresistas demócratas podrían encontrar en este proyecto de ley la vía para que los beneficiarios del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) obtengan la ciudadanía. Los inmigrantes con estatus de protección temporal y los trabajadores agrícolas también podrían convertirse en estadounidenses.
Tanto Schumer cómo la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, han manifestado su voluntad de que este gran plan presupuestario incluya aspectos migratorios, una posición secundada por Biden. Pero los demócratas esperan todavía un dictamen legal que les aclare si pueden incluir esas medidas dentro de este paquete legislativo.
- Más Medicare: Los demócratas quieren extender la cobertura médica en la docena de estados que se siguen negando a ampliar el seguro de salud estatal conocido como Obamacare. Uno de los objetivos es que los ciudadanos de más edad tengan seguro dental, auditivo y oftalmológico.
Los caucus hispano, negro y asiático están presionando para incluir este punto, básico para la población con menos recursos económicos, pero se prevé que las conversaciones sean largas ante su alto costo.
- Comidas escolares gratuitas para todos: Los progresistas quieren que todos los estudiantes de colegios públicos reciban desayuno, almuerzo, merienda y cena gratuitos, independientemente de los ingresos de sus familias.
Durante la pandemia de coronavirus, el Departamento de Agricultura rebajó los requisitos para que las escuelas ofrecieran comidas gratuitas. El presidente, Joe Biden, ordenó que se mantenga ese baremo hasta junio de 2022, pero un sector demócrata quiere que sea permanente.
Cuenta con el apoto de la Asociación de Nutrición Escolar y la Asociación Nacional de Educación, el mayor sindicato de maestros en el país. Los republicanos consideran sin embargo que es demasiado caro.
- Prescripciones médicas más baratas: Reducir el precio de los medicamentos con receta es un objetivo común de los demócratas, aunque todavía no han acordado cómo conseguirlo.
Los progresistas en la Cámara de Representantes han respaldado un plan para que Medicare negocie los precios con las farmacéuticas. Pero un sector del partido cree que esto impediría el desarrollo de nuevos medicamentos.
- Educación: El presidente anunció hace unos días en Illinois su intención de ampliar la educación pública a la guardería, así como que los dos primeros años de universidad pública sean gratuitos.
Los congresistas demócratas deben encontrar ahora la fórmula para encajar los planes del mandatario y calcular el costo total de esta iniciativa.
- Cambio climático: Se está presionando para que se incluya más dinero para las prácticas agrícolas respetuosas con el medioambiente, incluidos los programas de conservación.
El proyecto de infraestructuras de Biden, al que acompañaría este paquete legislativo, ya prevé 1,000 millones de dólares en cinco años para ayudar a la industria agrícola a alcanzar la meta de cero emisiones de gases de efecto invernadero.
- Exenciones fiscales: El plan de infraestructura (que sí tiene apoyo de ambos congresistas de ambos partidos) incluye desgravaciones fiscales por hijos y por ingresos, y exenciones para los gastos de guardería.
Pero se espera que los demócratas introduzcan una nueva ventaja fiscal para las energías renovables, los bonos conocidos como Build America (unas subvenciones federales que reducen el costo de los préstamos estatales y locales para proyectos de infraestructuras); y una ampliación del crédito fiscal que fomenta las inversiones en zonas de bajos ingresos, y subvenciones fiscales para viviendas asequibles.