Por Adam Beam — The Associated Press
SACRAMENTO, California — Los votantes de California decidirán en noviembre si garantizan el derecho al aborto en la constitución de su estado, una cuestión que seguramente impulsará la participación en el debate durante un año electoral en el que los demócratas intentarán mantener el control del Congreso después de que la Corte Suprema anulara el caso Roe v. Wade.
El fallo del tribunal del viernes permite a los estados decidir por sí mismos si permiten el aborto. California está controlada por demócratas que apoyan el derecho al aborto, por lo que el acceso a este procedimiento no se verá amenazado en breve.
Pero el derecho legal al aborto en California se basa en el “derecho a la intimidad” de la constitución estatal. La sentencia de la Corte Suprema declaró que el derecho a la intimidad no garantiza el derecho al aborto. Los demócratas de California temen que esta sentencia deje las leyes de aborto del estado vulnerables a la impugnación en los tribunales estatales.
Para hacer frente a esto, los legisladores estatales acordaron el lunes poner en la boleta electoral de este año una enmienda constitucional que no deje dudas sobre el estatus del aborto en California.
“Aunque por ahora nos sintamos seguros aquí en California, no podemos dormirnos en los laureles”, declaró la asambleísta Sabrina Cervantes, demócrata de Riverside. “Es sólo cuestión de tiempo que esto te afecte directamente a ti y a las personas que amas”, agregó.
La enmienda declararía que el estado “no negará ni interferirá con la libertad reproductiva de un individuo en sus decisiones más íntimas, lo que incluye su derecho fundamental a elegir abortar y su derecho fundamental a elegir o rechazar anticonceptivos”.
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Sólo se convertiría en ley si una mayoría de los votantes la aprueba este noviembre. De los probables votantes de California, el 76% se opone a anular el caso Roe v. Wade, según una encuesta realizada en mayo por el Instituto de Políticas Públicas de California.
Esto podría dar un impulso a las posibilidades de los demócratas de conservar el control del Congreso. A pesar de su reputación progresista, California cuenta con una serie de competitivas elecciones a la Cámara de Representantes que ayudarán a determinar qué partido gana más escaños en noviembre para el resto del primer mandato del presidente demócrata, Joe Biden.
Los republicanos se opusieron a la enmienda, argumentando que es demasiado amplia y que permitiría abortar en las últimas etapas del embarazo cuando el feto es capaz de sobrevivir fuera del útero. La ley de California restringe actualmente el aborto sólo antes de que el feto sea viable, lo que suele definirse en torno a las 24 semanas de embarazo.
“La redacción de esto no dice nada sobre el último término. No pone ninguna restricción”, dijo el líder republicano de la Asamblea, James Gallagher, quien señaló que sus hijos gemelos tuvieron complicaciones a las 30 semanas de embarazo. “A los bebés como mis gemelos, a las 30 semanas, se les podría quitar la vida”, añadió.
La asambleísta Akilah Weber, demócrata por San Diego y ginecóloga-obstetra en ejercicio, dijo que muchos factores, además de la edad gestacional del feto, determinan la viabilidad, y argumentó que es mejor dejar la decisión en manos de la paciente y su médico.
“Esta enmienda... no sólo es compasiva, sino que está arraigada en el estado actual de la ciencia, la medicina basada en la evidencia y el panorama legal”, opinó.
California se une a Vermont en el intento de proteger el aborto en su constitución estatal. La propuesta de Vermont, que también se somete a votación este noviembre, no incluye la palabra “aborto”, sino que protegería la “autonomía reproductiva personal”, aunque existe una excepción “justificada por un interés estatal imperioso logrado por los medios menos restrictivos”.
La enmienda en California forma parte de la agresiva estrategia de los demócratas para hacer de California un santuario para las mujeres que buscan abortar. La semana pasada, el gobernador, Gavin Newsom, firmó una ley destinada a proteger a los proveedores y voluntarios de abortos de California de las demandas en otros estados, una medida destinada a frenar una ley de Texas que permite a los ciudadanos privados demandar a las personas que ayudan a las mujeres de ese estado a abortar.
El enorme presupuesto operativo de California -que se votará esta semana- contiene más de 200 millones de dólares en nuevos gastos para ampliar el acceso al aborto en el estado. El dinero pagaría los abortos para las mujeres que no pueden pagarlos, las becas para las personas que estudian cómo proporcionar abortos y el dinero para ayudar a las mujeres a pagar por la logística como los viajes, el alojamiento y el cuidado de los niños — pero sólo dentro del estado de California.
El debate sobre el aborto que tuvo lugar el lunes en la Legislatura estatal estuvo teñido de la emoción de las experiencias personales, ya que muchos legisladores detallaron sus propias experiencias con el aborto. La asambleísta Buffy Wicks contó que cuando tenía 25 años se quedó embarazada y decidió abortar. Esa decisión le permitió “tener una familia cuando estaba preparada”.
El asambleísta Isaac Bryan relató que su madre “se quedó embarazada de una violación” y optó por tenerlo y darlo en adopción.
“Me preguntan todo el tiempo por qué eso no me convierte en provida”, señaló Bryan. “Es porque mi madre tenía opciones. Tenía opciones, y eran suyas. Y me niego a ser simbólico para socavar la autonomía corporal de las mujeres y las personas que tienen hijos”.