El presidente, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris, instaron este sábado al Congreso a promulgar leyes que protejan el derecho al voto en honor al legado del ícono de los derechos civiles, el legislador John Lewis, a un año de su fallecimiento.
Biden señaló a través de un comunicado que a menudo reflexiona sobre la última conversación que él y su esposa mantuvieron con Lewis días antes de la muerte del congresista por Georgia.
"Nos pidió mantenernos enfocados en el trabajo inconcluso, el trabajo de su vida, de sanar y unir a esta nación", señaló el mandatario. Luego, dijo que ese trabajo inconcluso incluye "construir una economía que respete la dignidad del sector laboral con buenos trabajos y salarios".
Biden dijo que parte del legado de Lewis que hay que defender es garantizar que la igualdad ante la ley sea real en la práctica “y no solo una promesa grabada en piedra".
“Quizás, sobre todo, significa continuar la causa por la que John estaba dispuesto a dar su vida al proteger el derecho sagrado al voto”, agregó Biden.
El presidente criticó el asalto al Capitolio de EE. UU. ocurrido el pasado 6 de enero, cuando cientos de manifestantes burlaron la seguridad de la sede del Congreso, sembrando el terror entre los legisladores y otros trabajadores del Capitolio.

“Desde el Movimiento de Derechos Civiles de los años 50 y 60 no hemos visto ataques tan implacables contra el derecho al voto y la integridad de nuestras elecciones”, enfatizó Biden.
Por su parte, Harris reconoció también el legado de Lewis al que catalogó como “un héroe estadounidense”.
“Luchó de manera incansable por los más altos ideales de nuestro país: libertad y justicia, y por el derecho de todos los estadounidenses para que sean escuchados en las urnas”, afirmó Harris.
La vicepresidenta recalcó que la mejor manera de honrar el legado del congresista Lewis es con la aprobación de una legislación federal por el progreso del derecho al voto que lleva el nombre de John Lewis.
Lewis se convirtió en un símbolo de la lucha por los derechos civiles y defensor de la protesta no violenta en Estados Unidos. Era el más joven y el último sobreviviente de un grupo formado por seis grandes activistas de derechos civiles, encabezados por el reverendo Martin Luther King Jr.
Una de sus acciones más conocidas fue cuando lideró a unos 600 manifestantes en la marcha conocida como la del 'domingo sangriento' (Bloody Sunday, en inglés) en el puente Edmund Pettus en Selma, Alabama, donde soldados estatales le fracturaron el cráneo. Fue el último orador sobreviviente de la histórica marcha por el trabajo y la libertad de 1963 en Washington en la que Martin Luther King pronunció su celebre discurso "Yo tengo un sueño" (I have a dream, en el original en inglés).
Lewis murió después de una larga batalla contra el cáncer de páncreas que fue diagnosticado en estado avanzado.
"Nunca he enfrentado una pelea como la que tengo ahora", dijo Lewis cuando anunció su enfermedad.
Con información de AP