Un asistente personal de Joaquín El Chapo Guzmán, cuyo testimonio a las autoridades fue fundamental para enviar al exjefe del cartel de Sinaloa a una prisión de máxima seguridad en Estados Unidos para el resto de su vida, fue condenado este lunes a siete años de cárcel por una corte de San Diego acusado de contrabando de marihuana.
Mario Hidalgo Argüello, conocido con el alias de El Nariz, había sido extraditado a California junto con otros cinco narcotraficantes en enero de 2020. En septiembre, se declaró culpable de los cargos de los que era acusado por la Fiscalía estadounidense.
Este lunes, un juez federal de San Diego condenó a Hidalgo a siete años de prisión por importar marihuana en un yate de San Diego.
El juez William Hayes siguió la recomendación conjunta de los fiscales y de la defensa para dictar esa sentencia, que se aparta de la pena mínima obligatoria de 10 años a la que se enfrentaba Hidalgo.
Los investigadores consideran que Argüello era un asistente clave del cártel de Sinaloa, y uno de los hombres de confianza de El Chapo. Pero fueron precisamente sus revelaciones a las autoridades las que abrieron la puerta a su captura en México hace seis años y su posterior extradición y condena a cadena perpetua en EE.UU.
De acuerdo al diario Los Angeles Times, antes de la lectura de la condena Hidalgo compartió su historia personal y dijo al juez que era uno de los siete hijos criados por padres pobres y jornaleros.
“Uno crece y en lo que no deja de pensar en lo que es tener dinero”, aseguró a través de un intérprete de español.
Sandra Lechman, la abogada defensora de Hidalgo, le aseguró al juez que los acontecimientos que rodearon su detención en Culiacán fueron “muy traumatizantes”.
Tanto ella como su defendido afirmaron que la esposa de El Nariz fue agredida en el momento de la captura.
Hidalgo fue detenido el 17 de febrero de 2014 en su casa de Culiacán, la capital y ciudad más grande del estado mexicano de Sinaloa, por un grupo de marines mexicanos y agentes federales de Estados Unidos, según el diario San Diego Union-Tribune.
El supuesto asistente del narco se volvió en ese momento en contra de sus jefes y llevó a las autoridades mexicanas a las casas de seguridad de Guzmán Loera. Pero el capo escapó por un túnel antes de que pudieran atraparlo en el primer intento.
Finalmente El Chapo, fue arrestado por las autoridades mexicanas junto con un lugarteniente en un hotel en Mazatlán el 21 de febrero de 2014.
En ese momento, los funcionarios mexicanos describieron a Hidalgo como "el chico de los recados" y el mensajero de El Chapo.
El Nariz habría dado a conocer a las autoridades que el cartel equipó sus escondites con puertas de acero y túneles secretos bajo las bañeras que conducían a los sistemas de alcantarillado.
La captura de Hidalgo fue considerada un gran paso por los investigadores. “Sabía absolutamente todo sobre Guzmán Loera”, dijo Víctor Vázquez, un agente de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), que participó en la persecución de El Chapo, al testificar en el juicio federal del capo de la droga en Brooklyn en enero de 2019.
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Según informó Los Angeles Times, El Nariz no es ciudadano estadounidense y es probable que sea deportado a México cuando haya cumplido su condena.
Si bien la cooperación de Hidalgo Argüello no condujo directamente al arresto de El Chapo, sí proporcionó información que generó más detenciones.
En 2015, El Nariz, mientras estaba bajo custodia mexicana, fue acusado por un gran jurado federal en San Diego de tráfico de marihuana.
Durante el juicio del siglo en el que se sentenció a cadena perpetua a Joaquín Guzmán Loera, el sobrenombre de Hidalgo Argüello salió en varios momentos a la luz, en uno de ellos como uno de los secretarios privados y confidentes del capo.