La Navidad deberá esperar en partes del Reino Unido: el primer ministro británico, Boris Johnson, anunció este sábado un nuevo periodo de cierre y cuarentena debido a lo rápido que se han esparcido las infecciones de una nueva cepa del coronavirus SARS-CoV2.
El cierre de negocios no esenciales estará vigente en Londres y en el sureste de Inglaterra, ahora calificados como zonas de nivel 4; es en esa región, especialmente en Kent, donde se han reportado en últimos días más casos de la nueva variante.
El Reino Unido ya comenzó su campaña de vacunación tras dar aprobación de emergencia a la vacuna de Pfizer, pero hasta ahora no se han vacunado suficientes personas como para que se considere que las demás estarán protegidas.
"Duele el corazón decirlo, pero no podemos seguir con la Navidad como regular. Hay que sacrificar nuestra oportunidad de ver a nuestros seres queridos esta Navidad para que sí haya oportunidad de proteger sus vidas tal que podemos verlos todavía en Navidades futuras", indicó el primer ministro.
En las zonas de nivel 4, se advertirá a las personas que salgan de casa que no deben estar en las calles y se restringirá el acceso desde zonas que estén en un menor nivel de emergencia. Habrá excepciones para personas que vayan al trabajo si no puede hacerlo desde casa, a algún lugar para cuidados infantiles o si se trata de familias con custodia compartida que necesitan trasladar a sus hijos. Sí se permitirá ejercitarse al aire libre.
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La variante llamada VUI2020/01 es hasta 70% más contagiosa que la que estaba presente en territorio británico antes, según Johnson, aunque el primer ministro recalcó que no hay indicaciones de que sea más mortífera o de que las vacunas ya existentes no protejan contra la variante.
En el resto de Inglaterra, la gente sí tendrá permitido tener reuniones, pero con la sugerencia de que solo lo hagan en burbujas pequeñas y en un solo día entre el 23 y el 27 de diciembre.
En Gales, en tanto, el periodo de cuarentena nacional empezará este domingo 20 y se incentivará que las únicas reuniones sean el día de Navidad con un aforo de dos hogares distintos máximo. Mientras que en Escocia y en Irlanda del Norte el encierro forzoso comenzará el 26 de diciembre.
Tan solo el viernes, las autoridades británicas reportaron 28,500 contagios y la muerte de 489 personas.
Esas cifras posicionan al Reino Unido como el segundo con más contagios en Europa y el sexto país con más infecciones en todo el mundo.Aunque sigue estando lejos de Estados Unidos, donde la pandemia se encuentra en su peor punto y en los últimos días ha habido entre 120,000 y 270,000 contagios reportados diarios.
Son las medidas más estrictas que ha adoptado el Gobierno británico desde que se impuso otra cuarentena, en marzo, cuando el mismo Johnson tuvo que ser hospitalizado por COVID-19.
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El anuncio del primer ministro demuestra el temor de que, en lo que avanzan las vacunaciones en el mundo, las variantes del virus SARS-CoV2 traigan una transmisión altísima en pleno invierno, que de por sí desata enfermedades respiratorias que van desde la gripe común hasta la influenza.
"Cuando el virus cambia su método de ataque tenemos que cambiar nuestro mecanismo de defensa", declaró Johnson en una conferencia de prensa.
"Necesitamos actuar en reacción a la información conforme esta nos llega, porque esto se está esparciendo muy rápido", agregó, en referencia a la nueva variante.
Con información de AP y The Guardian