La atleta venezolana Yulimar Rojas, especializada en salto triple, consiguió volar este domingo y elevarse 15.67 metros, una marca que le permitió romper el récord mundial y convertirse en la primera mujer campeona olímpica de la historia de su país.
Antes que ella, solo habían logrado oro en unos Juegos Olímpicos tres deportistas hombres: el boxeador Francisco Rodríguez en México 1968, Arlindo Gouveia por taekwondo en Barcelona 1992 y Rubén Limardo, quien en Londres 2012 se impuso en esgrima.
“Wow, yo estoy sin palabras. No tengo voz, no tengo palabras para describir este sentimiento, este momento", dijo Rojas durante una entrevista que transmitió Telemundo Deportes tras la competencia. "Medalla de oro olímpica, récord olímpico, récord mundial. Y wow, una noche fantástica, me siento en las nubes”.
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“En realidad, nosotros estábamos buscándolo, estábamos intentándolo, sabíamos que teníamos esa marca ahí en las piernas para hacerla hoy, esta noche, y estábamos fallando un poco en el área técnica", continuó. "Pero creo que el último salto era un salto para darlo todo y así fue. Solo me concentré en dar lo mejor de mí, en disfrutar y bueno, ha salido. Estoy muy feliz”.
“Solo me queda vivir esta experiencia que agradezco a Dios primeramente”, concluyó la ahora reina del salto triple, quien forma parte del equipo de atletismo del Barcelona FC, y es abiertamente lesbiana y luchadora por los derechos de la comunidad LGBTQ, que no son respetados en su país de origen.
La carismática atleta inició su participación en la final de este domingo con un salto de 15.41 metros que la dejó a solo 2 centímetros del récord olímpico impuesto por Francoise Mbango de Camerún, en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Pero la mejor marca del mundo de 15.50 metros, impuesta por la ucraniana Inessa Kravets en 1995, era su principal objetivo.
“Es Yulimar contra Yulimar”, afirmó el narrador de Telemundo Deportes al momento de iniciar su competencia.
Tan pronto terminó, la sorpresa de los comentaristas era evidente: "Y se supera a ella misma, increíble Yulimar Rojas, despierta Venezuela, despierta Caracas, Yulimar es la campeona olímpica. ¡Determinación y sacrificio puro! Su emoción es latente y la sentimos desde el estadio olímpico hasta acá”.
“Ella entrena al 120%”
Tan pronto Rojas confirmó que su salto era válido, explotó en llanto. No podía parar de llorar: se tiró al suelo. Luego se levantó, mientras gritaba “¡Síiiii!”. Vio a su entrenador en la tribuna –el admirado extriplista cubano Iván Pedroso, oro olímpico de Sídney 2000– y comenzó a sollozar de nuevo, mientras de fondo se escuchaban gritos de “¡Viva Venezuela!”.
Fue su compañera de entrenamiento, la española Ana Peleteiro –medalla de plata en esta misma competencia– quien la convenció para que tomara una bandera de Venezuela y diera un paseo en la pista.
“Poder entrenar con la ahora ya sí la mejor de la historia es la hostia (...) Ella todos los días entrena al 120%. Se le metió en la cabeza ser la mejor y todos los entrenamientos con Yuli son así”, dijo Peleteiro en una entrevista que le hicieron horas después del encuentro.
Mucha gente, dentro y fuera de Venezuela, vio la competencia con la misma pasión. En redes abundaron los posteos de personas de todas partes del mundo que compartieron el emocionante momento, que también fue celebrado por su familia en Anzoátegui (en el oriente del país): festejaron el logro histórico frente a cámaras de televisión.