Varios líderes de la comunidad LGBT se mostraron indignados tras conocerse que el gobierno de Donald Trump trabaja en una nueva definición de género que negaría el reconocimiento federal y limitaría los derechos civiles de los transgéneros estadounidenses.
"Se trata de un esfuerzo por restringir la aplicación de las leyes de derechos civiles ya existentes a los transgéneros", dijo Chase Strangio, activista transgénero y abogado de la Unión Americana de Libertades Civiles.
Según un documento obtenido por el periódico The New York Times, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) está reescribiendo una regla federal que actualmente prohíbe la discriminación en la atención médica basada en “identidad de género”.
La HHS, mediante un documento del que no ha hecho ningún comentario, propone definir el género como una condición biológica inmutable determinada por los órganos sexuales que una persona tiene al nacer.
Esta propuesta definiría el sexo como masculino o femenino, y cualquier disputa tendría que esclarecerse con pruebas genéticas, según el reporte del periódico.
“Me siento muy amenazada, pero estoy absolutamente decidida”, dijo Mara Keisling, directora ejecutiva del Centro Nacional de Derechos Transgénero durante una conferencia convocada por más de una decena de líderes activistas.
“Lucharemos y seremos fuertes, y estaremos aquí después de que esta administración esté en un montón de basura”.
Roger Severino, director de laOficina de Derechos Civiles de la HHS, aclaró que la agencia revisa el tema a través del fallo del juez federal de Texas, Reed O’Connor, quien concluyó en el 2016 que la regla original iba demasiado lejos al estipular que la discriminación basada en identidad de género es una forma de discriminación sexual, que está prohibida por las leyes de derechos civiles.
Los activistas, quienes prometieron que habrá impugnaciones legales si dicho cambio entra en vigor, dicen que otras cortes han emitido fallos opuestos a los de O’Connor.
“Durante años, las cortes de diversas partes del país han reconocido que la discriminación en contra de alguien que es transgénero es una forma de discriminación sexual, punto final”, dijo Dianna Flynn, directora de litigios de Lambda Legal.