El gobernador de Virginia, el demócrata Ralph Northam, concedió el martes el indulto póstumo a siete hombres negros que fueron ejecutados en 1951 por la violación de una mujer blanca.
El grupo, conocido como los Siete de Martinsville, fue condenado por jurados integrados totalmente por blancos en un caso que atrajo peticiones de clemencia de todo el mundo y que que en los últimos años ha sido denunciado como un ejemplo de disparidad racial en la aplicación de la pena de muerte.
Los hombres fueron condenados por violar a Ruby Stroud Floyd, de 32 años, una mujer blanca que había ido a un barrio predominantemente negro de Martinsville, Virginia, el 8 de enero de 1949, para cobrar la ropa que había vendido.
Cuatro de los hombres fueron ejecutados en la silla eléctrica en Virginia el 2 de febrero de 1951. Tres días después, los otros tres también fueron electrocutados. Fue el mayor grupo de personas ejecutadas por un delito de una sola víctima en la historia de Virginia.
Los siete, la mayoría en su adolescencia o veinteañeros, son Grayson, Frank Hairston Jr.; Howard Lee Hairston; James Luther Hairston; Joe Henry Hampton; Booker Millner; y John Clabon Taylor, según la agencia de noticias AP.
El gobernador de Virginia firmó el indulto tras mantener una reunión con familiares de los condenados el pasado martes y tras escuchar sus peticiones.
Tras la decisión, los familiares estallaron en aplausos y varios se cubrieron la cara y sollozaron tras oír la decisión gubernamental, según el diario The Washington Post.
“Setenta años. ¡Setenta años!" exclamó Pamela Hairston, una de los familiares de los sentenciados, quien llevaba casi tres décadas escribiendo cartas para llamar la atención sobre el caso.

Northam emitió una serie de "indultos ordinarios", en los que no se aborda la culpabilidad o la inocencia de los condenados, pero se reconoce que los casos se habían tratado con "desigualdad racial" y había deficiencias en el proceso, según comunicó su oficina a los medios.El gobernador ha emitido más de 600 indultos desde que asumió el cargo en enero de 2018, lo que supera el número total otorgado por los nueve gobernadores de Virginia anteriores, según su oficina.El caso de Martinsville se convirtió en un controvertido asunto relacionado con la protección de los derechos civiles poco después de que los hombres fueran arrestados en enero de 1949.Ese mes, una mujer blanca pasaba junto a un grupo de hombres negros que bebían junto a las vías del tren en la ciudad de Southside, en el estado de Virginia cuando, según declaró, uno de ellos la abordó.Durante un lapso de aproximadamente dos horas la mujer testificó en el juicio que varios de los hombres la violaron repetidamente, amenazaron con matarla si gritaba y la arrastraron al bosque después, desde donde pudo escapar, relata el diario.

La policía detuvo rápidamente a siete hombres negros y presentó sus confesiones firmadas. Aunque se dijo que los siete admitieron haber tenido relaciones sexuales o haber intentado tener relaciones sexuales con la mujer, sus descripciones de los hechos difirieron y todos se declararon inocentes de los cargos de violación.
En ese momento, la violación era un delito capital. Pero Northam señaló el martes que la pena de ejecución por violación se aplicó casi por completo a los negros. Desde 1908, cuando Virginia comenzó a usar la silla eléctrica, hasta 1951, los registros estatales revelan que las 45 personas ejecutadas por violación eran negras, según el gobernador.
“Estos hombres fueron ejecutados porque eran negros y no está bien. No deberían haber sido ejecutados”, dijo Northam.
Varios de los acusados eran analfabetos y no podían leer sus propias confesiones, y ninguno tenía un abogado presente cuando firmaron la declaración. Fueron condenados en solo ocho días por jurados integrados totalmente por blancos y ejecutados en la silla eléctrica en febrero de 1951.
El caso provocó protestas en la Casa Blanca y puso de relieve una gran desigualdad en el sistema de justicia penal de Virginia: entre 1908 y 1951, 45 hombres fueron ejecutados por violación y todos eran negros, recuerda el rotativo.
Northam ha concedido ya un total de 604 indultos desde que asumió el cargo en 2018, más que los nueve gobernadores anteriores juntos, según anunció el martes su Administración.
Con información de AP y EFE.