La farmacéutica Purdue Pharma llegó a un acuerdo este jueves con un grupo de fiscales generales de varios estados por el que pagará 6,000 millones de dólares en efectivo para resolver los múltiples litigios en los que estaban involucrados sus dueños, la familia Sackler.
Los fiscales generales de ocho estados y el Distrito de Columbia habían rechazado un acuerdo anterior por el que la familia Sackler habría tenido que pagar 4,500 millones de dólares.
A cambio del nuevo acuerdo, la familia Sackler estará protegida de demandas civiles por su papel en la epidemia de opioides.
Como parte del plan, los Sackler deberán contribuir en total con unos 10,000 millones de dólares a lo largo de varios años. También se comprometieron a dejar de controlar Purdue Pharma para convertirla en una nueva entidad que destine sus ganancias a combatir la crisis de los opioides.
El acuerdo no protege a los Sackler de las demandas penales, aunque no hay nada que indique que se vaya a presentar alguna en su contra.

Más de 500,000 personas en Estados Unidos han muerto por sobredosis de opioides en las últimas dos décadas.
Los miembros de la familia Sackler no se han disculpado públicamente por su papel en la venta del analgésico OxyContin, al que muchos pacientes se volvieron adictos luego de que descubrieran que podían manipularlo para provocar estados de euforia.
Purdue Pharma había promovido el uso de OxyContin para una amplia gama de padecimientos que los médicos no habían tratado antes con opioides.
“Si bien las familias han actuado legalmente en todos los aspectos, lamentan sinceramente que OxyContin, un medicamento recetado que continúa ayudando a las personas que sufren de dolor crónico, se haya convertido inesperadamente en parte de una crisis de opiáceos que ha causado dolor y pérdida a demasiadas familias y comunidades”, indicó en un comunicado la familia Sackler.
El juez federal Robert Drain, de una corte especializada en bancarrotas, deberá aprobar el acuerdo que los Sackler alcanzaron con los fiscales generales antes de que pueda implementarse. La próxima audiencia se llevará a cabo el 9 de marzo.
Purdue agregó que el nuevo acuerdo proporcionaría fondos adicionales para los programas de reducción de daños de los opioides, medicamentos contra las sobredosis y efectivo para las víctimas.
Cuando finalice el proceso legal de la quiebra, Purdue Pharma dejará de existir y en su lugar surgirá una nueva empresa, Knoa Pharma LLC, propiedad de National Opioid Abatement Trust, una entidad controlada por los acreedores de Purdue.
Las muertes por sobredosis de opioides se han disparado durante la pandemia de COVID-19, incluyendo las que han sido causadas por otro analgésico sintético, el fentanilo, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.