Por Pete Williams – NBC News
Clarence Thomas, uno de los magistrados más conservadores de la Corte Suprema de Estados Unidos, señaló este lunes que, debido al enredo de las políticas federales en torno a la marihuana, las leyes federales que prohíben su uso o cultivo puede que ya no tengan sentido.
"Una prohibición del uso o cultivo interestatal de marihuana ya no sería necesaria o adecuada para apoyar el enfoque fragmentado del Gobierno federal", escribió el magistrado.
Su opinión se produjo cuando el tribunal se negó a escuchar la apelación de un dispensario de marihuana medicinal de Colorado al que se le negaron exenciones fiscales federales que sí se le permite a otro tipo de empresas.
Thomas indicó que el fallo de la Corte Suprema en 2005, que ratifica las leyes federales que decretan como ilegal la posesión de marihuana, puede estar desactualizado.
“Las políticas federales de los últimos 16 años han debilitado en gran medida ese razonamiento", dijo.

"El actual enfoque del Gobierno federal es un régimen a medias que simultáneamente tolera y prohíbe el uso local de marihuana", agregó Thomas.
Un total de 36 estados permiten la marihuana medicinal y 18 admiten su uso recreativo. Pero las leyes federales impiden a los negocios que comercializan con la marihuana deducir sus gastos comerciales en sus declaraciones de impuestos.
El Departamento de Justicia ha instruido a los fiscales federales de la nación a no entablar casos en contra de negocios de marihuana que acatan las leyes estatales. Y desde 2015, el Congreso ha instruido al Departamento de Justicia de abstenerse en gastar dinero federal para prevenir que los estados establezcan sus propias leyes.
Pero el Servicio de Rentas Internas o IRS sigue ejecutando sus propios reglamentos en contra de los negocios y cultivadores de marihuana.
“La inclinación” del Gobierno "para hacerse de la vista gorda con la marihuana es más anecdótica que coherente”, culminó Thomas.