Por Chantal Da Silva - NBC News
El FSB, la máxima agencia de seguridad nacional rusa y sucesora del KGB soviético, arrestó el jueves a un reportero estadounidense del diario The Wall Street Journal, Evan Gershkovich, de 31 años, al que acusa de espionaje. El periódico negó categóricamente la acusación y pidió su liberación. Es la primera vez desde la Guerra Fría que un corresponsal estadounidense es detenido y acusado de espionaje.
Gershkovich fue arrestado en la ciudad de Ekaterimburgo, en los Montes Urales, acusado de “espionaje en interés del Gobierno estadounidense”, según detalló el Servicio Federal de Seguridad (FSB) citado por la agencia rusa de noticias Interfax. Alegó que el periodista “actuaba con instrucciones de Estados Unidos para recabar información sobre las actividades de una de las empresas del complejo militar-industrial, que constituye secreto de Estado”.
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El periodista compareció ante una corte en Moscú y rechazó los cargos, pero el tribunal decidió mantenerlo entre rejas a la espera de que concluya la investigación, al menos hasta mayo. Si es declarado culpable, puede enfrentarse a hasta 20 años de cárcel.
El diario especializado en información económica negó "de forma vehemente" las acusaciones del FSB y pidió la liberación inmediata del "confiable y dedicado reportero" "Nos solidarizamos con Evan y su familia", manifestó The Wall Street Journal en un comunicado
Gershkovich, que habla ruso, cubre información relativa a Rusia, Ucrania y la antigua Unión Soviética. Sus padres viven en Estados Unidos y son originarios de la antigua Unión Soviética.
Anteriormente trabajó para la agencia de noticias francesa Agence France-Presse y el diario The Moscow Times. También fue asistente de prensa en el periódico The New York Times, según su perfil en la web de The Wall Street Journal.
Su artículo más reciente, en el que colaboró como coautor, llevaba por titular: La economía rusa empieza a desmoronarse.
Crecientes tensiones entre Rusia y EE.UU.
Su detención se produce en medio de las fuertes tensiones entre Rusia y EE.UU. por la invasión rusa de Ucrania, y cuando el régimen ruso mantiene su política de reprimir la libertad de expresión.
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También ocurre tras el canje de prisioneros que permitió liberar a la estrella de la WNBA Brittney Griner de un penal ruso en diciembre a cambio del traficante de armas Viktor Bout. La deportista fue arrestada por llevar cartuchos de vapeo con cannabis en la valija.
Paul Whelan , un ejecutivo estadounidense de seguridad corporativa encarcelado por cargos de espionaje, sigue encarcelado.
Gershkovich es el primer reportero estadounidense detenido por espionaje en Rusia desde septiembre de 1986, cuando Nicholas Daniloff, corresponsal en Moscú de U.S. News and World Report, fue arrestado por el KGB. Daniloff fue puesto en libertad sin cargos 20 días después en un canje por un empleado de la misión de la Unión Soviética ante Naciones Unidas, detenido por el FBI por espionaje.
En los últimos años, el líder ruso, Vladimir Putin, ha supervisado la mayor represión contra la prensa libre y la disidencia política desde la era soviética.
Su invasión a gran escala de Ucrania se ha intensificado, con la adopción en el país de leyes estrictas que prohíben las críticas al ejército y la huida del país de muchos periodistas.
“Esperemos a ver qué presenta concretamente el FSB, pero parece que han tomado un rehén”, declaró Tatiana Stanovaya, académica no residente de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional y fundadora y directora de la empresa de análisis político R.Politik.
“Sin duda, esto lleva la relación entre Rusia y Estados Unidos a un nuevo nivel de confrontación”, añadió.